CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Sin aviso, previa visita ni notificación, personal de la Profeco procedente de la Ciudad de México visitó gasolinerías de la capital y clausuró en el acto las bombas despachadoras que no pasaron la verificación oficial.
En la estación Marlin los inspectores federales colocaron los sellos de suspensión e inhabilitaron las máquinas abastecedoras para continuar en otros negocios.
Alejandro Martínez Castañón, encargado de la delegación federal de la Profeco en Tamaulipas, dijo desconocer cuántas estaciones fueron verificadas por este personal, pero reconoció que tienen la facultad para inmovilizar los equipos de bombeo que no pasen la verificación.
Sólo se conocerá la cobertura y alcance de estas visitas inesperadas hasta que los resultados se publiquen en la página oficial de la Procuraduría, en un plazo de dos días o una semana.
Martínez Castañón explicó que las oficinas centrales de la Profeco utiliza la estrategia de practicar visitas no programas o concertadas, donde se muestra un oficio sellado para iniciar la revisión, y se supervisa el funcionamiento de los dispensarios, el sistema eléctrico, y el abasto correcto del combustible litro por litro.
Este año la Profeco reforzó el operativo en todo el país y en Victoria han sido sancionadas 6 estaciones de servicio en lo que va del 2016, de las cuales 2 se llevaron a cabo en marzo y 4 en el mes de junio.
También se aplicaron sanciones económicas por diferentes cantidades y se apercibió a las empresas de clausuras definitivas en caso de reincidencia.
De acuerdo con la página de la Profeco con los resultados de las últimas verificaciones realizadas en julio, todavía no aparecen las de agosto, y las multas por no respetar precios o vender litros incompletos podrían subir hasta los 2 millones de pesos.
En Victoria existen alrededor de 50 estaciones de servicio y en todo el estado más de 400, que pueden ser susceptibles de estas revisiones sorpresivas que buscan garantizar el cumplimiento de la Ley Federal de Protección al Consumidor.




