1.- Un bache es algo más que un hoyo en la calle que la impotencia, la incompetencia o la mala fe, permitieron que existiera para hacer más difícil la vida de los victorenses. Un bache no es sólo un hoyanco en el pavimento, sino un hueco en el espíritu que deprime la voluntad de mejorar el hogar de todos, y mostrar el mejor y más limpio rostro de la ciudad.
2.- El bache es pedagógico, porque cualquier día nos destrozará el vehículo y nos enseñará a gastar un dinero que no estaba en los bolsillos, y nos deja sin oportunidad de reclamarle al culpable. El bache no sólo destruye automóviles e impide el libre tránsito de las personas, sino también genera el nefasto pesimismo que paso a paso lleva a la degradación del espíritu del ciudadano, para conformarse con vivir como sea y en la total mediocridad.
3.- El abandono de la fisonomía del municipio es una ofensa a nuestro pasado, y un agravio a las generaciones de victorenses ilustres que lucharon por engrandecer a esta tierra. También es una afrenta al presente; hacia quienes la vivieron en mejores tiempos y actualmente los añoran. Asimismo, es un desprecio hacia el porvenir; hacia los niños victorenses que hoy graban en sus mentes infantiles las tristes vivencias de una ciudad colapsada por los baches y la lluvia.
4.- Mantener la calidad de vida y los servicios que presta la ciudad, son objetivos que se persiguen todos los días, y por los que hay que luchar cada instante. Los trabajos de pavimentación y de bacheo, son labores permanentes cuyo abandono deteriora a la ciudad, y menoscaba la voluntad de superación y cambio de los ciudadanos.
5.- Ningún victorense puede sentirse orgulloso de que a ciudad Victoria la llamen la “Capital del Bache”, así como tampoco puede ver con buenos ojos que las autoridades gastan los recursos públicos en asuntos superfluos, mientras que la ciudad se deteriora en perjuicio de todos.
6.- La sociedad exige que le gasto público tenga prioridades, y que no se haga más demagogia con frases y slogans que apunten hacia la victoria, y que lamentablemente terminan en la derrota.
7.- Afortunadamente el presidente municipal Óscar Almaraz ha tomado la decisión de mejorar la imagen de la ciudad, y ya comenzó a planear la solución al problema de los baches. El lunes pasado ante síndicos, regidores y personal del municipio, el alcalde declaró: “Nuestro compromiso como servidores públicos es con la gente, quieren respuestas inmediatas, esperan mucho de nosotros, pongámonos las pilas, tenemos que trabajar fuerte”.
8.- Asimismo expresó: ”Quiero que todos pongamos nuestro mayor esfuerzo para entregar resultados lo más pronto posible, que pensemos como equipo en Victoria, porque la ciudadanía ya está cansada de promesas y es urgente entregarles buenos resultados”.