TEXAS.- Ventas bajas ante la falta de mexicanos, sobre todo tamaulipecos, que eran los principales clientes del Valle de Texas, llevaron a los comerciantes de Brownsville a rebajar los precios de sus productos hasta el 50 por ciento, con la finalidad de atraerlos nuevamente durante la temporada decembrina.
Al parecer no son los únicos que resienten los efectos de un dólar caro para la economía de sus vecinos del sur, pues el servicio de transporte foráneo en la central camionera también bajó dramáticamente este año.
Estos sectores de la economía que dependen en gran parte de los extranjeros culpan a la cotización del dólar, por encima de los 20 pesos mexicanos, de esta desestabilidad económica.
En entrevista con una vendedora de la tienda Cariño reveló que existen otros factores que están influyendo y son las exhaustivas revisiones de parte del Servicio de Aduanas de Estados Unidos y las de México.
“Desafortunadamente esto nos afecta, pero también influye que los padres familia ya optan por comprarle a sus hijos aparatos electrónicos, así que nuestras mercancías no les llaman la atención”, declaró la mujer quien no quiso revelar su nombre.
La entrega de aguinaldo llevó a algunos turistas a consumir en los comercios de Brownsville, largas filas de vehículos y peatones se apreciaron este fin de semana .
Pero aun así, para los vendedores locales no es suficiente, no se compara con otros años.
“Hace unos dos años nuestros clientes llevaban mercancías con un valor de hasta 200 dólares, ahora por mucho nos consumen 45”, declaró la entrevistada.
Por su parte Martín Fernández de la empresa de transporte foráneo Omnibus Express de la central camionera B-Metro dice que en los 23 años de experiencia que tiene en el ramo de transporte nunca se habían tenido ventas tan bajas entre los meses de septiembre a noviembre.
“No nos explicamos a qué se deba, no está subiendo pasaje y creemos que hay crisis económica y el tipo de cambio de pesos a dólares”, declaró.
Indicó que la mayoría de los que viajan actualmente al norte de Estados Unidos son los residente del Valle del Río Grande con destino a Houston, Dallas y San Antonio.
“Los paisanos que están llegando a la frontera, bajaron hasta un 80 por ciento. Ellos vienen la mayoría de Atlanta, de Florida y Las Carolinas. Se dirigen a Mante, Victoria y Tampico Tamaulipas, Valles San Luis Potosí y al sureste de la costa”, añadio.
Comparado a otros años ha sido muy bajo, aunque esperan que a partir de hoy repunte la venta al acercarse la navidad y días de asueto.
Añadió que viajeros de otras nacionalidades como cubanos, centroamericanos tampoco están utilizando esta frontera para viajar al norte del país.
En tiendas de reconocidas marcas y algunos establecimientos del Sunrise Mall también están ofertando mucha mercancía y entregando cupones de descuento.
..Y los puentes lucieron con poca afluencia
El día de ayer en Matamoros los puentes internacionales lucieron vacíos, con un tiempo de espera no mayor a los 15 minutos.
Durante un recorrido que se realizó por los puentes internacionales, se pudo observar que era poca la afluencia de vehículos, así como de peatones, el
los distintos cruces que existen en Matamoros.
Ayer las filas que se formaron fueron relativamente cortas, pues en el Puente Nuevo apenas llegaba a donde inicia la avenida Alvaro Obregón, sin que los automovilistas de estresaran por tanto tiempo de espera, pues se tenia 4 carriles abiertos y el tiempo de espera fue de 20 minutos, y en el peatonal de
7 minutos.
Mientras tanto, el puente Viejo, el cruce vehicular fue de 7 minutos, con 4 carriles abiertos, y para los peatones si espera; lo que reflejo el poco
interesé de los matamorenses en cruzar hacia los Estados Unidos.
Por otra parte, en los demás puentes como el puente Ignacio Zaragoza o mejor conocido como Los Tomates el cruce era no mayor a los 7 minutos con cuatro carriles; y el Libre Comercio o Indios en 22 minutos con dos carriles abiertos.
De acuerdo al personal que opera en las casetas de Caminos y Puentes Federales (Capufe), la afluencia no ha sido la que se esperaba, pues durante los días festivos pasados se crearon largas filas con un tiempo de espera hasta de dos horas.