CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- A partir del 15 de junio del 2017, en que se libere el precio de las gasolinas en Tamaulipas, se estima que anualmente se incrementarán en un siete por ciento el número de estaciones de servicio en el estado, de acuerdo con el presidente nacional de Onexpo, José Ángel García Elizondo.
Explicó que la cercanía del estado con Estados Unidos y el ser de las primeras entidades en que los precios se liberarán, lo ubica en una posición privilegiada sobre el resto de los estados.
“Al ser un estado colindante con Estados Unidos, que es el país que concentra la mayor cantidad de marcas, sin duda alguna, Tamaulipas estará experimentando un incremento en el número de estaciones de servicio, por arriba del promedio nacional”.
Explicó que las estimaciones que se tienen del 2017 al 2030 es que se presentará un incremento del cinco por ciento en el país en el número de estaciones de servicio, sin embargo, para Tamaulipas el porcentaje sería de un siete por ciento.
García Elizondo recordó que en el país operan 11 mil 500 estaciones de servicio y en Tamaulipas se cuenta con 566 gasolinerías distribuidas en los 43 municipios, “estimamos que año con año, pudiera estarse elevando hasta un cinco por ciento, la cantidad de estaciones de servicio del país, pero en Tamaulipas pudiéramos pensar que en el corto plazo, pudiera tener un incremento superior al promedio nacional, estamos hablando de un siete por ciento, ya que Tamaulipas es de los primeros estados en que se libera el precio y por consiguiente de los primeros estados en que van a entrar empresas
extranjeras”.
El presidente nacional de la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo), apuntó que como parte de la reforma energética, se debe detonar, crear y fortalecer la infraestructura que permita que el país, en el largo plazo, pueda ser más competitivo en el tema energético.
“Esa infraestructura va desde más gasolineras para tener mejor cobertura, instalaciones de logística como terminales de almacenamiento, ductos, vías ferroviarias para transportar combustible, hasta refinerías para poder aprovechar la producción de los campos que se están licitando actualmente y que en mediano plazo entren en operación”.
García Elizondo comentó que sin embargo, la comunicación sobre los beneficios de la reforma o no han sido bien comunicados o mal interpretados, al creer que los beneficios sobre un precio de combustible más barato sería inmediato.
“Eso ya no lo puede determinar el gobierno, eso ya lo va a determinar el mercado y no el mercado mexicano sino el mercado global”, agregando que si la apertura de precios se hubiera dado hace dos años en que el precio del precio del petróleo estaba a 18 dólares el barril y el tipo de cambio estaba a
13.50, otra sería la historia, “estaríamos dando de brincos porque el precio de los combustibles, sin duda, hubiera bajado”.
Señaló que las condiciones actuales son muy distintas de ese escenario, pues el precio del barril supera los 50 dólares y el tipo de cambio está en 21 pesos, “desafortunadamente nos tocó hacer esta transición que se plasmó en la reforma energética, en un momento en que los combustibles y el precio del combustible están altos, pero realmente nos vamos a tener que acostumbrar a estar en un mercado con precios reales, pueden ser hacia la baja o a la alza”, señaló.