CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Propietarios de abarrotes en barrios y colonias de Victoria, expresaron su incertidumbre por los aumentos en cascada que traerá el gasolinazo en el costo de los productos que venden, por lo que pidieron a la dirección de Desarrollo Económico del municipio, les ofrezcan asesoría para sobrevivir al vendaval.
Aunque ninguna instancia de fomento económico de los tres niveles de gobierno tiene un padrón de estos establecimientos, se sabe que son unas 17 mil familias que dependen de este ramo comercial en esta ciudad capital.
Celia Sánchez Azuara, propietaria del minisúper Los Reyes, de la colonia Ampliación Industrial, recordó que en los últimos años han podido sobrevivir a la proliferación de tiendas de conveniencia, pero el gasolinazo tal vez sea el fin de cientos de abarrotes de barrio.
Consideró que estas tiendas de esquina son muy importantes porque ahí radica un soporte de autoempleo, al ser en su mayoría operados por la misma familia, precisamente porque no hay oportunidades de trabajo en Victoria.
“A mí me gustaría que vinieran del municipio o no sé de donde para que nos apoyen, los gastos fijos que tenemos son muy fuertes, los proveedores no tardan en imponer aumentos y no sabemos cómo vamos a enfrentar esta situación”, expresó preocupada.
Los gastos fijos son de al menos 20 mil pesos por mes, la mayoría del dinero se va en el recibo de la luz con 12 mil pesos mínimo, más el costo del agua y contribuciones, explicó.
Surgen especuladores Jesús Alberto Bautista, propietario de un minisúper en el rumbo del Fovissste, denunció la especulación que están realizando los proveedores, pues aún ni impacta el alza de la gasolina y ya todo viene con sobre precio a la alza.
Dijo que empresas trasnacionales de panes, refrescos y frituras ya aplicaron el aumento del impuesto marcado para el inicio de cada año, pero ya les anunciaron que dentro de unos días vendrá otro aumento relacionado al incremento del 20 por ciento en la gasolina. “Ya están adelantándose y eso es un abuso que las autoridades deben impedir, aquí andan sueltos, nadie les pone un freno”, denunció.
Viven de lo fiado
En opinión de Miguel Cruz Hernández, quien le ayuda a sus padres en la tienda familiar, dijo que gracias a que estudió una carrera de Contaduría ha podido apoyar la subsistencia del negocio.
Contó que este tipo de comercios por su tamaño y estructura enfrentan muchas dificultades, principalmente la falta de financiamiento acorde a sus necesidades y la única opción son los apoyos oficiales, sólo que no hay mucho de donde escoger.
“Lo fuerte de estos negocios son las ventas de fiado con gente conocida del mismo barrio, esa es la verdad, aunque ni eso nos va a salvar del cierre si las cosas vienen tan difíciles como se dice”, argumentó.
Dijo que en los 30 años que lleva este establecimiento en la familia, ninguna autoridad les ha ofrecido financiamiento, capacitación ni nada más allá de la campaña que hizo el SAT hace algunos años durante la emigración del pago de impuestos digitales.
Sacarán de estantes la latería cara
Otro propietario de la Ampliación Industrial señaló que la primera medida que tomará frente al gasolinazo, será sacar de la venta productos que no son básicos, como harina para pasteles, frutas enlatadas y otros por el estilo para no quedarse con mercancía estancada.
Dijo que a lo largo del año siempre hay aumentos que imponen los distribuidores que no pasan de un peso, pero al acumularse comienzan a pesar en el bolsillo de la clientela y se deben tomar medidas.