CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- En la guerra de las consultas médicas, los consultorios anexos a las farmacias que venden medicamentos genéricos se están llevando la tajada más grande, ya que a diferencia de los institutos públicos, la atención es más rápida, y en contraste con los médicos especialistas, el costo es mucho menor.
Consultar con un médico particular cuesta hasta mil pesos, en contraste, las instituciones públicas 100 pesos, pero en los consultorios de farmacias el costo es de sólo 30 a 50 pesos.
A través de la seguridad social, los derechohabientes pueden consultar de forma gratuita en las clínicas del IMSS, ISSSTE, el General “Norberto Treviño Zapata”, el Civil “Dr. José Macías Hernández”, y el Infantil, sin embargo, el no estar inscrito en algún sistema de seguridad representa que se les cobrará la consulta. El Hospital Regional de Alta Especialidad Bicentenario 2010, consulta por 200 a 250 pesos con el médico general, el Hospital Infantil, 150 pesos, el Civil, 95 pesos, el General, 70 pesos, y los Centros de Salud, 70 pesos.
Pero en el lado opuesto, los consultorios anexos a farmacias tienen un costo menor, por ejemplo, en las farmacias de Similares y la Guadalajara sale
entre 30 y 50 pesos.
Además, cuando se consulta en una farmacia el tiempo de espera disminuye, ya que no se tiene que esperar que se atienda a toda la derechohabiencia.
“Yo tengo seguro, pero tardan mucho en atender, llega uno a las siete de la mañana y termina consultando hasta las 12 o una del mediodía, es demasiado tiempo”, comentó el señor Salatiel Rodríguez, quien acudió con el médico de la farmacia Guadalajara.
“La verdad, prefiero pagar 30 pesos para que me atiendan bien, rápido, y no tener que estar esperando”.
Y es que cuando alguien se siente mal, paga incluso hasta a un médico particular, que en este momento puede cobrar entre 300 a 600 pesos, si es general, pero si es especialista aumenta hasta 500 ó mil pesos.
“Pues ir al ISSSTE es perder tiempo, y la atención es muy tardada. Si tengo dinero yo prefiero al particular, aunque me cobre más, sé que el servicio va a ser mejor, porque en el ISSSTE nos atienden como animales”, relató Fernanda Linares.
“No siempre se puede con el particular, pero cuando sí se puede pues hay que aprovechar, aunque después tenga que consultar en el ISSSTE para que me den las medicinas nada más”. Este fenómeno ha causado que las farmacias que venden medicamentos genéricos y de cadena, que tienen consultorios anexos, vayan en aumento.
De acuerdo a los datos de la Unión de Farmacéuticos en la Zona Centro del Estado, hay 167 farmacias de empresarios locales, mientras que 500 son de cadena.