MATAMOROS, Tamaulipas.- El encarecimiento el dólar en lo que va del presente año, que se encuentra arriba de los 22 pesos, ha provocado que en estos momentos estén paralizadas las ventas de autos usados, por los altos costos que tienen actualmente las unidades, motivo por el cual no se descarta que así como desaparecieron las comercializadoras de autos, también van a cerrar quienes venden autos en las calles.
Eso ha provocado que tampoco haya importaciones de autos usados por la Aduana, porque resulta mucho más oneroso hacerlo ahora con un dolar tan caro, reconoció ayer Raúl Quintanilla de la Garza, comerciante del ramo en la frontera.
Si antes de la fuerte devaluación acumulada que lleva el peso frente al dólar, era costoso importar un auto por la Aduana, ahora resulta prohibitivo porque se tiene que hacer con un dólar de 22 pesos y sobre ese cambio pagar los impuestos al Servicio de Administración Tributaria.
Dijo que un auto usado de mil 500 dólares, que antes los residentes podían comprar en Matamoros en 27 mil pesos, ahora tienen que desembolsar por la misma unidad 33 mil pesos.
Expuso también por la devaluación el peso frente al dólar, el pago de impuestos en la Aduana se han disparado, porque los valores que tiene Hacienda para cada auto se calculan con el nuevo tipo y con esa base pagan impuestos.
Reconoció que con la fuerte devaluación que ha sufrido el peso mexicano, el Gobierno ha logrado cerrar definitivamente las importaciones legales de autos.
Y también en estos momentos la venta de autos usados en la ciudad, se ha desplomado porque como las unidades se cotizan en dólares, ahora resultan muy costosas.
Eso representa, agregó, un duro golpe para los comerciantes de autos usados, porque no pueden tener una inversión fuerte parada. Si los autos no se venden no hay negocio y la inversión se va perdiendo con el paso del tiempo.