La novela del salinismo, estrena nuevos capítulos. Veamos: desde hace años, en una conversación con Paloma Guillén, me habló de su gran amistad con Claudia Ruiz Massieu, la hija de José Francisco Ruiz Massieu, presuntamente asesinado por órdenes de su tío paterno Raúl Salinas de Gortari, en septiembre de 1994. En ese tiempo, Claudia era una jovencita de 22 años. Recién egresada de la UNAM. Se había afiliado al PRI, en 1992, sin sospechar siquiera, la trágica suerte de su padre, en este partido.
Extraña, pero muy extraña familia la de los Ruiz Massieu: por un lado un hermano víctima de un crimen, aún sin resolver y por la otra, un segundo hermano, (Mario, el ex procurador) que se suicida de manera inexplicable. Les hablo de eventos que cimbraron al país, y que, ya desde aquel momento, colocaron a conocidos tamaulipecos, en el ojo de una tormenta de inseguridad..aun vigente.
A principios de los años ochenta, en los alfombrados pasillos del entonces flamante congreso local, construido por órdenes del gobernador Emilio Martínez Manaotou, la memoria evoca a tres jóvenes políticos priístas: ella, una jovencita muy bella, con un cigarro en los labios. Ellos, sus amigos, también legisladores, de Mante y de Victoria. Eran Paloma, Abraham Rubio Canales y Jaime Rodríguez Inurrigarro.
En 1995, un año después del magnicidio de Ruiz Massieu, el mantense Rubio Canales declaraba a la revista Proceso, desde su reclusión en un penal de Acapulco, que, en su momento, el sub Procurador Mario Ruiz Massieu, lo había presionado para que acusara a Manuel Muñoz Rocha, como el responsable de asesinar a su hermano.
El tamaulipeco pasó varios años en prisión, por supuesta malversación de fondos del Fideicomiso Acapulco. En esa misma entrevista, Rubio Canales declara que, entre José Francisco y Raúl Salinas, nunca existió una buena relación.
La primera mitad de los noventas, fue cruel para muchos tamaulipecos, y para los priistas a nivel nacional. Matan a un candidato presidencial, (Colosio), a un Secretario General, (Ruiz Massieu) y al Cardenal Posadas Ocampo. A finales de 1994, sobreviene la guerrilla del Sub Marcos en Chiapas.
Fueron acontecimientos que marcaron el final de la era priísta que ya sólo duraría seis años más, y sucumbiría ante el PAN, en el 2000.
En esa época, desaparece físicamente del mapa, Manuel Muñoz Rocha, presuntamente asesinado. El ex gobernador Enrique Cárdenas González, es mencionado en el complot, donde asesinan a Ruiz Massieu.
Posteriormente, el presidente Ernesto Zedillo puso en el escenario nacional, la historia de que la familia Salinas planeó y mandó ejecutar al padre de la actual Secretaria General del CEN del PRI. Todo eso fue descartado.
Hoy, Claudia Ruiz Massieu, Paloma Guillén, y Silvana Beltrones, son tres mujeres que, desde el CEN del PRI, buscarán rescatar el barco de Peña Nieto, una embarcación a punto de hundirse.
Claudia Ruiz Massieu, es hija de un político, cuyo crimen jamás se ha aclarado. Silvana Beltrones es hija del político, al cual Carlos Salinas le encargó supuestamente hacerse cargo y borrar toda evidencia, en el magnicidio de Colosio. Y Paloma Guillén, es hermana del líder guerrillero, que irrumpió en Chiapas, el primero de enero de 1994.
En todo esto, parece haber un hilo conductor: tanto ayer como ahora, la influencia del ex presidente Salinas es evidente.
El reto de estas tres ángeles de Charly, ( ¿Carlos Salinas?), son muy concretos. En primer lugar, lograr el triunfo del PRI y de su candidato Alfredo del Mazo Maza, el primo del presidente Peña Nieto. Pero no sólo eso.
Este año, estas tres guerreras, deberán de trabajar horas extras para lograr triunfos en Nayarit y en Coahuila. Y las complejas alcaldías veracruzanas. Claudia, Paloma y Silvana.
La tragicomedia salinista, está de regreso.
De esto y de aquello
“Fortaleciendo la identidad institucional, en COMAPA Victoria”, escribió en las redes, el titular de esta institución, Gustavo Rivera Rodríguez. Lo anterior, se dio, el pasado miércoles, durante la entrega de uniformes al personal administrativo. Esto quiere decir que no sólo a los trabajadores de campo, se les apoya. También a quienes diariamente laboran en la atención al público y en las diversas oficinas del tema agua potable.
Por otra parte, Cabeza de Vaca empieza a cumplir sus compromisos de campaña: ayer jueves, arrancaron los operativos carreteros de la Policía Interestatal, que en su primera etapa, contará con 394 elementos, de las corporaciones Fuerza Civil y Fuerza Tamaulipas.
El gobernador Francisco García Cabeza de Vaca y el “Bronco” de Nuevo León, dieron el banderazo de salida. En el caso tamaulipeco, aun faltan por poner en marcha, convenios similares con los gobiernos de Veracruz y de San Luis Potosí.