CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- El Ejército y la Policía Federal ingresaron anoche y tomaron el control del Centro Estatal de Ejecución de Sanciones (Cedes) de Victoria, luego que grupos de internos se enfrentaron, provocaron disturbios por tercer día consecutivo e incendiaron los restos de las barracas improvisadas que un día antes fueron convertidas en escombros por maquinaria oficial.
La Vocería de Seguridad de Tamaulipas confirmó que en los hechos murieron tres reos y uno más se encuentra muy grave.
Los fallecidos son: Marco Antonio Marqués Urreta, Erick Ramírez Soto, Eden Martínez Castro, mientras que José Ramón Ochoa Pérez se reporta en estado grave.
La altura de las llamas mantuvo expectante a la población y los familiares de los internos se concentraron nuevamente en la puerta de acceso, en busca de información.
Los desórdenes comenzaron desde la noche del miércoles cuando un grupo de 29 internos escaparon a través de un túnel de 5 metros de profundidad y 40 metros de longitud.
La situación habría comenzado en el módulo 2, en represalia porque la autoridad destruyó las construcciones irregulares y que fueron habilitadas como tiendas en donde se vendían refrescos, cigarros, comida pero también cerveza y en donde se encontraron navajas que utilizaban como armas.
Autoridades federales llegaron al lugar para impedir el tráfico por la avenida Luis Caballero en donde se encuentra el penal de Victoria.
Los familiares de los internos exigían la presencia de la Comisión Estatal de Derechos Humanos para que pueda constatar el estado de salud de los internos.
De acuerdo con el Vocero de Seguridad de Tamaulipas, Luis Alberto Rodríguez Juárez, se descarta que se trate de una fuga, como había trascendido de manera preliminar.
Los vecinos de las colonias aledañas a la parte posterior del penal, compartieron fotografías a través de las redes sociales del incendio que se presentó y que al parecer está siendo controlado, quedando una humareda.
Intensifican búsqueda
Los operativos para localizar a los 17 reos que aún permanecen prófugos se han extendido a otros estados, confirmó el Vocero de Seguridad, de Tamaulipas, Luis Alberto Rodríguez Juárez.
Las fichas de los reos fueron boletinadas a las autoridades de Nuevo León, San Luis Potosí y Veracruz, ante la posibilidad de que hubieran huido a esas entidades, buscando esconderse y de esta manera evadir la acción de la justicia, en tanto que en el estado se continúan realizando operativos por aire y tierra en la capital del estado, así como en los 43 municipios del estado.
De acuerdo con la información, los reos prófugos purgaban penas por delitos como robo de vehículos, portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, robo, secuestro, atentados a la seguridad de la comunidad, delincuencia organizada, homicidio y filicidio.
Este viernes al interior del penal se realizaron labores para destruir las tiendas y algunos dormitorios que fueron construidos con madera, palos y lámina y que servían para que algunos tuvieran mayor privacidad del resto de los reos.
Retroexcavadoras derribaron las construcciones improvisadas como tiendas en donde se vendían refrescos, cigarros, golosinas, comida y hasta cerveza, en donde el jueves por la noche, tras realizarse una revisión, se encontraron algunas navajas que utilizaban los internos como armas.
Casi al final del penal, cerca de las canchas de basquetbol y futbol y de un taller de carpintería, se encuentra un pasillo formado por pequeños cuartos construidos con madera y láminas, justo al final de los cuales se encuentra el túnel, que, de acuerdo a las autoridades, llevó por lo menos un año construir y por donde se escaparon los 29 reos.