Hoy, para los creyentes de la Fe católica, es Sábado de Gloria, el día después del viacrucis vivido por JESUCRISTO que terminó en crucifixión por la traición de JUDAS, la participación de PILATOS y la sentencia de HERODES, el día que JESÚS estuvo en el cielo, a la diestra del Padre, para posteriormente resucitar su cuerpo.
Este México lindo y querido también vive su viacrucis, muchos años en la violencia, la inseguridad y, para acabarla de amolar, saqueado por políticos malos, por eso es que este pueblo hoy, mañana y siempre quisiera que ya nos llegará nuestro Sábado de Gloria para mañana en tierra azteca vivir en paz.
Lamentablemente para los JUDAS, HERODES y PILATOS de los últimos tiempos, no han terminado nuestros tormentos, ellos siguen prestos a cambiar monedas por tranquilidad, lavarse las manos para que el inocente pueblo cargue la cruz de sus culpas y los HERODES para seguir en el poder aún no sacian su sed de sangre.
Eso es real, desafortunadamente a diario se vive en todo México el viacrucis, cada quien carga una cruz, algunas más pesadas que otras, pero al fin y al cabo, de una manera u otra, pagamos por los delitos ajenos, por la ambición y voracidad de otros.
Día a día se viven traiciones, unas más dolorosas y devastadoras que otras, pero al fin traiciones y aunque se quisiera que todo fuera cordialidad, paz y tranquilidad, la realidad es que los JUDAS asechan en cualquier lugar con su beso de fuego que calcina amistades para saciar ambiciones.
En este mundo hostil y cada vez más lleno de maldad los JUDAS venden no sólo al amigo sino hasta a la familia por unas cuantas monedas.
Igual en estos tiempos sobran los que emulan a PEDRO que para defenderse o seguir en el juego político antes del amanecer niegan a sus amigos más de tres veces.
Sobran los PILATOS que, aún a sabiendas de que sus jefes resultaron unas lacras o de que están castigando a inocentes para pagar favores mejor se lavan las manos y dejan que el mundo siga su marcha por injusto que parezca.
Parece que los gobiernos mexicanos juegan ese papel, el de PILATOS y el de HERODES, apenas se sienten con poder azotan al pueblo con el látigo de su desprecio, traen peleando a unos con otros, cometen atrocidades y luego pretenden lavarse las manos.
Los HERODES, políticos que semejan emperadores de los viejos tiempos, cambiaron los ropajes porque ahora visten multicolores, pero siguen con las mismas prácticas, matan para no compartir la gloria, castigan a quien creen les puede hacer sombra, apenas llegan al poder se vuelven indiferentes, azotar al pueblo con impuestos, aumentos a la canasta básica y combustibles que son como latigazos en la maltrecha economía del mexicano que cada vez siente más peso en su cruz.
Mientras el pueblo llora sus desventuras con las traiciones de los JUDAS, la demostración de poder de los PILATOS, los HERODES que se crecen con el dolor ajeno y gozan al crucificar, las MAGDALENAS políticas aparecen tratando con sus lágrimas convencer al pueblo de que todo lo que hacen es por el bien común.
En fin, la situación es que en nuestro país por culpa de políticos corruptos el viacrucis el pueblo mexicano se vive a diario, son muchos los males que azotan a este México que carga la cruz por una mala elección o por permitir que políticos se sientan emperadores, dueños de voluntades, que crucifican con sus malas políticas a la gente inocente.
Malas políticas que obligan a las familias de escasos recursos económicos a que vivan a diario un viacrucis para enfrentarse a la vida, a la necesidad de alimentar a sus hijos, vestirlos, darles educación y, no se diga, si tienen que enfrentar una tragedia o enfermedad.
Pero aun con tanta corrupción y maldad todavía hay gente buena, la bondad no muere, aunque sienten que el mundo se les acaba, no ven ni un rayito de luz que les guíe, nunca pierden la fe y para ellos ver un nuevo amanecer es día de gloria, motivo de agradecimiento y de esperanza.
Los que en su lucha por salir adelante y ver realizados sus sueños, en el ámbito profesional o económico, también se enfrentan diariamente al viacrucis de la desigualdad, su espíritu los hace levantarse y seguir luchando, habrá noches que no duerman, días que no prueben bocado alguno pero continúan adelante, sin perder la ilusión y aferrándose a un sueño para convertirlo en realidad, eso es lo que mantiene a este pueblo de pie aun con tanto JUDAS, PILATOS y HERODES de los últimos tiempos.
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