*El autor es Premio Nacional de Periodismo 2016.
El PRD busca crear un frente de oposición bajo el objetivo de “echar de la presidencia al PRI”. Hasta el este domingo por la mañana su dirigente Alejandra Barrales mantenía la esperanza de que MORENA se uniera a dicho proyecto solo que la asamblea nacional de esta organización le dijo “nanay”, sea que de ninguna manera hará causa común con un partido que tuvo el descaro de aliarse durante el reciente proceso electoral con el enemigo histórico de las izquierdas, es decir, con el PAN. (Recordéis que lo hizo en Nayarit).
Pero, “¿en qué cabeza cabe?”, diría mi santa abue, que MORENA podría ir al lado del PRD cuando está científicamente comprobado que a sus líderes encabezados por la Barrales solo les interesa el poder por el poder mismo. En este sentido el calificativo de “mercenarios” aplicado por AMLO es el más adecuado con todo y que la mujerona se ostente como una “activista social”.
El asunto es que ya se decidió que MORENA no va con el PRD en las elecciones del próximo año en cambio sí lo hará con el PT por la sencilla razón de que este partido fue el único que respondió cuando “el peje” llamó a apoyar a su candidata al gobierno del estado de México. En este caso el PRD prefirió halagar a Peña Nieto facilitando el triunfo de su primo Alfredo del Mazo mismo que ya sabéis, utilizó todas las trampas a que puede tener acceso un priista marcado por la corrupción.
De manera que la Barrales busca una coalición “para echar al PRI de la presidencia” como si no supiera que el tricolor es un cadáver que empieza a apestar y del que todos huyen. Un grotesco ejemplo es lo que sucede en Tamaulipas donde cada vez son menos los que desean participar de esta macabra danza de la muerte.
Por otra parte, es del conocimiento público que el PRD está infestado de traidores a la izquierda. Desde los mentados “chuchos” hasta Bejarano, la Padierna e incluso Alejandro Encinas quien desde hace muchos años se mantiene en las nóminas oficiales navegando media agua, como los robalos. Y ni modo que sea invento.
Quedamos en que el PRD busca acomodarse al futuro para que sus próceres sigan chupando el presupuesto pero mucho logrará si sobrevive. Digo porque no será extraño que el éxodo de militantes hacia MORENA ahora observado lo deje en ceros más temprano que tarde.
De manera que los mexicas estaríamos asistiendo a dos funerales políticos en el corto plazo: el del PRI y PRD.
La presencia de AMLO
Imposible de ocultar lo sucedido el sábado anterior en la capital del estado durante la visita de López Obrador. Imposible porque fueron miles los que le acompañaron en un evento sin “acarreados” donde quedó de manifiesto que MORENA ya se convirtió en poderosa fuerza política con capacidad para situarse en primer lugar en Tamaulipas.
Fueron miles insisto, que acudieron por voluntad propia. Hay frustración pero también deseos de abrir nuevos caminos que clarifiquen el destino de la república.
El discurso de AMLO fue claro y contundente como acostumbra. Sin palabras rebuscadas sino precisas que en esta ocasión encontraron eco en quienes se
apersonaron en número no visto desde hacía mucho tiempo en cualquier acto político. En este marco “el peje” celebró que la organización de MORENA en Tamaulipas vaya por inmejorable camino con la existencia de comités en los 43 municipios.
Para decirlo pronto, fue una fiesta popular con plena identificación entre un probable presidente de México y miles que ya le pusieron nombre a su
esperanza de que la nación cambie y se aproveche su riqueza en beneficio de las mayorías y no solo de unos cuantos enquistados en “la mafia del poder”.
El columnista considera que a partir de este sábado inició una nueva historia para un estado que ya perdió demasiado tiempo. Y si no pa’l baile vamos.




