CIUDAD MADERO, Tamaulipas.- El Cetmar y el grupo de Conservadores de la Biodiversidad y Educadores Ambientales (Cobea), trabajan en la preservación de especies como lo es el catán, misma ha disminuido su presencia en la zona conurbada por la pesca furtiva.
A decir de Raúl Piñeiro Salvador, director Regional de Grupo Cobea cada año se liberan catanes en el sistema lagunario, mientras que otra parte son para comercializarse y consumirlos, ya que en la gastronomía es muy cotizado por su sabor.
“Es un área de trabajo del Cetmar en el cual como grupo apoyamos las actividades de reproducción, lo que se llama desove y el mantenimiento de los organismos en todo el año, lo que es limpieza y alimentación, tanto alumnos como los integrantes de grupo Cobea”.
El propósito de la crianza de catanes en los estanques del plantel educativo son dos: liberación de organismos, es decir introducción a su medio ya que su población es muy baja en comparación a otros años y por el otro está la engorda de los organismos para la comercialización y consumo.
Piñeiro Salvador refiere que el kilo de carne de catán se vende hasta en 200 pesos el kilo en algunos establecimientos y “su baja población se debe a la pesca, ya que son altamente apreciados en la gastronomía”.
Agregó que cada año se hace una liberación de catanes cuando hayan alcanzado un tamaño que les permita sobrevivir y cuando se encuentran en la escuela, el grupo Cobea se encarga de alimentarlos con 20 kilos diarios de carne y es que llegan a medir hasta 3 metros de largo.