San Fernando, Tam.- Vinculada a proceso penal quedaron la tesorera del Sindicato Único de Trabajadores del R. Ayuntamiento y el ex director de Alumbrado Público, luego que el fiscal anti secuestros de la Procuraduría General de Justicia del Estado, encontró elementos suficientes en su contra para pedir se les procese por el presunto delito de simulación de secuestro.
La empleada municipal y actual tesorera del sindicato mencionado, Alma “N”, y el ex director de alumbrado público en la administración pasada, Luis Carlos “N”, al declarar ante las autoridades del Nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio y Oral, se inculpan entre si de haber mandado los mensajes de texto al esposo de la mujer pidiéndole 30 mil pesos para liberarla ya que estaba privada de su libertad.
Este jueves se llevó a cabo la continuación de la audiencia inicial dentro de la carpeta 28/18 donde el fiscal anti secuestros con sede en la ciudad de Matamoros, licenciado José Luis Paulín, tras exponer las pruebas contundentes en contra de los imputados solicitó la vinculación a proceso y un plazo de seis meses para la investigación complementaria.
Cabe mencionar que los hechos se registraron el pasad0 31 de Julio alrededor de las 08:05 de la mañana cuando Heraclio “N”, que se desempeña como regidor en el vecino municipio de la Villa de Méndez, esposo de Alma “N”, recibió en su teléfono celular un mensaje, donde le pedían la cantidad de 30 mil pesos para dejar en libertad a su mujer ya que estaba secuestrada.
Tras estar intercambiando mensajes de texto con los presuntos secuestradores, se acordó la entrega del dinero al filo de las 13:00 horas en el estacionamiento del Palacio Municipal, ubicado en la calle Iturbide y Juárez de la zona centro, donde fueron detenidos posteriormente.
Los agentes estatales, realizaron la detención de la pareja y la pusieron a disposición de las autoridades investigadoras, donde salió a relucir que se trataba de un autosecuestro, logrando recuperar el dinero.
En sus declaraciones la mujer dijo que acaba de ser liberada ya que estaba privada de su libertad, también dijo que ese día refiriéndose al 31 de Junio había acudido para verse con Luis Carlos, para pedirle que dejara de molestarla ya que constantemente la acosaba, pero al verla bajar de su carro marca Chevrolet, tipo malibú color gris, la obligó a subir a su camioneta jeep Cherokee, llevándola a un hotel, donde la mando a un cuarto y le quitó su teléfono celular, luego de amenazarla con causarle daño a sus hijos.
También dijo la mujer que Luis Carlos la pretendía desde hace más de tres años, y cuando la dejo en el cuarto del hotel, le dijo que ya le había mandado mensajes a su esposo pidiéndole dinero para dejarla en libertad y cuando la fue a dejar, le pidió le diera el sobre amarillo que estaba debajo del asiento de su auto.
Por su parte el inculpado dijo que esto es mentira, ya que habían quedado de verse debido a que desde hace más de dos años y medio mantienen una relación extramarital, desconociendo todo lo relacionado con el secuestro, negando haber enviado los mensajes al esposo de Alma.
También indicó que llego al hotel a bordo de una camioneta Cherokee propiedad de su esposa y tras dejar a la mujer en el cuarto que rentó se retiró pero antes ella le pidió le dejara su teléfono celular, ya que el de ella no traía saldo, para regresar posteriormente y sostener relaciones sexuales, volviéndose a retirar ya que recibió llamadas para atender varios trabajos.
Posteriormente dijo que el día de los hechos al filo de las 14:00 horas al regresar al hotel, Alma le dijo que la llevara a su carro, porque tenía que retirarse al recibir una llamada de su madre que estaba enferma y necesitaba ir a verla, pero como andaba en su camioneta que tiene los vidrios claros, tuvo que conseguir un carro para poder llevarla ya que no quería que la vieran con el.
Además el imputado dijo que al llegar al estacionamiento ubicado en la calle Iturbide y Juárez, de la zona centro fue a dejarla a donde estaba el carro de su acompañante, fue rodeado por Policías Estatales que le dijeron secuestrador, procediendo a detenerlo y trasladarlo al complejo de Seguridad Pública.
Aun cuando el inculpado niega los hechos, las autoridades judiciales encontraron elementos suficientes para poder vincularlos a proceso penal, además de iniciarse durante los próximos seis meses la investigación complementaria para poder aportar pruebas en su contra y pedir la sentencia correspondiente.