Arranca otra fuerte apuesta millonaria por aguas petroleras de México, particularmente las ubicadas en las costas de Tamaulipas, Veracruz y Tabasco. La Ronda 3.1 que se abrió este 28 de septiembre -que tiene previsto como fecha para dar fallo el 28 de marzo de 2018- empezó con controversias, después un elemento inédito, culminando con buenas expectativas para los probables inversionistas con la presentación realizada por Pedro Joaquín Coldwell, secretario de Energía.
La controversia se originó por el modelo de contrato que utilizó la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), que recomendó sin unanimidad por adjudicar licencias, a pesar de que hubo distintos argumentos a favor de contratos de producción compartida en 35 bloques exploratorios en la primera licitación de la Ronda Tres.
Lo inédito está que por primera vez se ofertan áreas en las aguas someras de la Cuenca de Burgos, donde se ubican 14 bloques frente a las costas de Tamaulipas, justo en los municipios de Matamoros, San Fernando, Soto La Marina y Aldama. Sin duda, esto traerá una nueva dinámica para las costeras tamaulipecas, en lo particular, la proveeduría local que va desde hotelería, restaurantes, gasolineras y hasta los lancheros que bien conocen las particularidades de esos bellos
litorales; ahora es cuestión que los gobiernos empiecen con la preparación previa de las comunidades para detonar la economía de los lugareños.
La expectativa de los probables inversionistas está puesta en bloques, 14 frente a la Cuenca de Burgos cuatro de ellos en la región norte, 13 más frente a la Cuenca de Tampico – Misantla, los restantes ocho en la Cuenca del Sureste frente a las costas de Veracruz y Tabasco. Si bien, el sector energético, particularmente las empresas extractivas, todavía es un renglón que presenta un serio rezago en México, la apuesta está para que después de 2018 empiece a dinamizarse al grado de tener un impacto positivo en la economía nacional de acuerdo a los pronósticos revelados por José Antonio Meade, secretario de Hacienda.
Justo lo referido por Meade es un elemento que no hay que perder de vista pues los beneficios tangibles de la reforma energética es un camino de largo trecho que se había postergado por lo menos veinte años, pero finalmente ya se dio guste o no. Sea quien sea el próximo presidente de la República, por el bien de México será casi imposible que pueda echar a la borda todo el tinglado que se ha generado con este nuevo paradigma energético del país y todos aquellos alaridos populistas que dicen que revocarán esta apertura en hidrocarburos, son eso: un ardid.
La Ronda 3.1 es el claro ejemplo que la estatización monopólica de Petróleos Mexicanos (PEMEX) no pudo explotar durante casi 80 años, ahora se cristaliza bajo un nuevo esquema comercial. Tampoco es para que la gente de Tamaulipas, Veracruz y Tabasco ya lo sientan en empleos o mayor derrama económica para 2018, es un proceso que llevará su tiempo que se estima dejará al menos tres mil 800 millones de dólares. ¿Usted qué opina?
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