Finlandia sorprendió a todos en el año 2000. Este país que obtuvo el primer lugar en Lectura, atendiendo al Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA); en matemáticas y ciencias obtuvo el 2º lugar. Es indudable que posee uno de los mejores sistemas educativos del mundo. En las últimas mediciones sus resultados han decrecido. Ello y otras cosas ha llevado al Ministerio de Educación y Cultura de Finlandia a implementar a partir de 2016 su nuevo curriculum obligatorio.
Hay claridad de la visión sobre el futuro en la educación finlandesa, también, un fuerte soporte económico. Se plantean cuatro grandes metas:
• Acompañamiento a los docentes. Se dirigirán hacia la inclusión de las tecnologías de la información y la comunicación en todas las escuelas, soportada por los nuevos aportes de las investigaciones pedagógicas.
• Impacto en la experimentación. A través del centro para la innovación del Consejo Nacional de Educación, darán impulso a la experimentación en las escuelas.
• Internacionalización de la educación escolar y cultural.
• Profesionalización docente, a través del desarrollo profesional.
La nueva escuela comprensiva de Finlandia, está dirigida hacia una educación centrada en el aprendiz, con docentes competentes y la promoción de una cultura
escolar de colaboración. Esos son muy buenos aspectos a tomar en cuenta. Docentes de alto calibre y sistema orientado al estudiante.
¿Cómo estamos nosotros?
Estamos inmersos en una Reforma Educativa sin precedentes; a la que se ha destinado y se destinarán muy pocos recursos económicos. Estamos verdaderamente lejos de un sistema educativo como el de Finlandia. Una seria profesionalización del docente no ha existido en México. El sistema educativo se ha dirigido a favorecer y desarrollar relaciones “clientelares”, por ende, a otros intereses, no ha importado el aprendizaje de los millones de niños, niñas, adolescentes y jóvenes del país.
Es entendible que la descentralización no haya funcionado, por las ínfimas condiciones para una gestión eficiente de los recursos por parte de las entidades federativas, con un altísimo grado de corrupción. Se ha desperdiciado muchísimo dinero, hay un verdadero exceso de docentes en labores administrativas y “comisiones”. Urge una indicación para convertir las plazas de docentes en funciones administrativas en otras acordes con la función que desempeñan. Es apremiante la optimización de tanto recurso desperdiciado en las oficinas y Centros Regionales para el Desarrollo Educativo (CREDE). Hay que apresurar la determinación de la cantidad de recursos humanos necesarios para el funcionamiento eficaz y eficiente del sistema.
Es necesario dar un impulso tangible a los Centros de Asistencia Técnica a la Escuela Tamaulipeca (CATET), a través de ellos se llevará a cabo la profesionalización docente y se conectará a la estructura con el Sistema de Asistencia Técnica a la Escuela Tamaulipeca (SATET).
Para lograr asesoría, acompañamiento y apoyo, las tres acciones esenciales de este servicio, hay que tener centros que funcionen para esta razón, con personal académico para tal efecto, que no desvirtúen la misión. Por ello habrá que asegurar la planta destinada a los CATET en el corto plazo.
El Equipo Técnico Estatal (ETE), que a partir del 1º de diciembre comienza formalmente a estar instalado en Tamaulipas, será itinerante, estará en las escuelas (con sus laptop y maletines rodantes), solo allí se encontrará con los supervisores, asesores técnicos (que trabajarán con los directores) y con los asesores técnicos pedagógicos (que trabajarán con los docentes). Está claro, no formarán parte de la estructura administrativa arcaica de los departamentos, que mayoritariamente se han dedicado a las cuestiones administrativas, importantes; pero que atrofiaron la esencia pedagógica de las anteriores “mesas técnicas” ubicadas en las oficinas centrales.
Nuestro modelo no es el finlandés, pero tiene intenciones comunes: centrarnos en el que aprende, apoyar al docente sirviendo a la escuela. Para ello, habrá que gestionar recursos humanos, económicos y financieros para que se activen: el ETE, el SATET y los CATET. Estos conforman la esencia de la labor de la Secretaría de Educación de Tamaulipas en Educación Básica.
Podemos aprender de Finlandia; pero, estamos en Tamaulipas.
¡Los tiempos de cambio están provocando movimientos pedagógicos!
*Subsecretario de Educación Básica
julio.pimienta@tam.gob.mx.