MANILA, Filipinas.- Decenas de miles de personas en el sur de Filipinas pasaron la mañana de Navidad en refugios de emergencia, según las autoridades, mientras la región respondía al paso de una poderosa tormenta que dejó más de 150 muertos.
La tormenta tropical Tembin provocó deslizamientos de tierra e inundaciones repentinas, especialmente en las afectadas provincias de Lanao del Norte y Lanao del Sur, y en la Península de Zamboanga. El sistema ganó fuerza para convertirse en tifón antes de salir del país el domingo hacia Vietnam atravesando el Mar de la China Meridional.
La cifra de víctimas el lunes por la tarde era de 164 muertos y 171 desaparecidos, indicó en una rueda de prensa Marina Marasigan, de la agencia filipina de gestión de desastres. Más de 97.000 personas seguían en 261 centros de evacuación en la zona sur del país y casi 85.000 más se vieron desplazadas y habían encontrado cobijo en otros lugares.
Es probable que las intensas lluvias en zonas montañosas provocaran deslizamientos de tierra que bloquearon el agua. Cuando se rompieron esos diques naturales por la presión, torrentes de agua se abatieron sobre los pueblos más abajo.
Las autoridades advirtieron a la población en zonas propensas a los accidentes que evacuaran rápido ante la llegada de Tembin, y el gobierno quería determinar qué había causado las altas cifras de muertos, añadió la representante de emergencias. Es difícil mover a gente de su casa poco antes de Navidad, señaló.