MÉXICO. El ayuntamiento de Tel Aviv, en Israel, se convirtió en el escenario de la torre de Lego más alta del mundo, construída para su registro en el Libro de los Récords Guinness con 36 metros de largo.
Los habitantes de la ciudad tardaron una año en levantarla y su objetivo fue rendirle homenaje a Omer Sayag, un niño que en 2014 falleció víctima de cáncer a la edad de 8 años y que disfrutaba las construcciones de Lego durante su enfermedad.
La figura cuenta con un millón de piezas y puede apreciarse frente al edificio de la municipalidad en la plaza Rabin, desbancando a la antigua torre más alta, hecha por la propia compañía en 2015 durante la Exposición Universal de Milán.
Con informacion de Rt.