San Fernando, Tam.- Un muerto y tres heridos fue el saldo de un fuerte accidente registrado la noche del pasado jueves sobre la carretera federal 97 Reynosa-entronque Urracas entre un autobús de pasajeros de la línea Futura y un vehículo habilitado como taxi, siendo trasladadas los lesionados al área de urgencias del nosocomio local.
Como José Ángel “N” , radicado en la ciudad de Reynosa, fue identificado el conductor del carro marca Nissan Tsuru, habilitado como taxi de la base Juárez, con número económico 24, fue identificado el ahora occiso, al quedar prensado dentro de la unidad.
El taxi circulaba de oriente a poniente por el camino que conduce al ejido La Purísima y al tratar de tomar la carretera a Reynosa a la altura del kilómetro 34+400, no hizo el alto correspondiente, ocasionando que fuera chocado por un autobús de la marca Iruzar, perteneciente a la empresa “Futura”, con el número económico 4922, que se desplazaba de sur a norte sobre la vía de comunicación y lanzado como a 50 metros, para ser proyectado contra unos árboles.
Las autoridades establecieron que en el taxi, también viajaban Verónica González Camarillo, Rosa Elena Camarillo Montalvo, de 65 y 55 años de edad, con domicilio en Reynosa, así como un menor de once meses de edad, de nombre Alexander Rodríguez Montalvo, quienes fueron trasladados a bordo de ambulancias de la Unidad de Protección Civil al área de urgencia de esta ciudad, ya que presentaban lesiones en diversas partes de su cuerpo.
Al sitio del percance acudieron oficiales de la Unidad General Investigadora Número Uno de esta ciudad, para tomar conocimiento del choque y ordenar el levantamiento del cadáver, así como iniciar con la carpeta de investigación correspondiente.
Por su parte los oficiales de la Policía Federal Preventiva, división Seguridad Regional, levantaron el peritaje, elaborar el parte de accidente y ponerlo a disposición de las autoridades correspondientes.
Correspondió a los elementos del cuerpo de bomberos al mando de su titular Martín Guadalupe Sánchez Aguilar, rescatar de entre los fierros retorcidos el cadáver del conductor de la unidad de pasajeros, para que fuera trasladado a una funeraria local para la práctica de la autopsia correspondiente.