Pasadas las fiestas y con el espíritu navideño guardado otra vez en el clóset por un año, es pertinente que recapitulemos sobre la guerra entre lobos que desangra políticamente al PRI, misma que se recrudeció mientras usted y yo sufríamos por la falta de lana para ayudarle a Santa Claus a comprar los regalos.
Así es mis queridos boes, porque resulta que entrado diciembre se destapó una cloaca que hoy tiene en vilo a varios gobernadores y ex gobernadores priístas que desviaron recursos federales y estatales a las campañas del tricolor en el verano del 2016, justo cuando el PRI perdió entre otros estados: Tamaulipas y Veracruz y desde luego Chihuahua de donde brotó la pus.
No son rumores, hay una declaración jurada y legal, al menos 250 millones de pesos fueron saqueados de las arcas públicas para la campaña del PRI, lo dijo un priista, acusó a más priístas; no es guerra sucia del PAN ni versiones complotistas de AMLO.
El caso es que el destinatario directo de la bomba mediática fue Manlio Fabio Beltrones; algo así como el padrino intocable del PRI, el jefe de jefes, porque cuando se transaron la lana, él era el dirigente nacional y su segundo de abordo lo operó junto con los gobernadores.
Pero la bomba alcanza, sin querer o queriendo a Luis Videgaray y ni más ni menos que a José Antonio Meade, uno canciller y el otro candidato a la presidencia por el PRI, el primero secretario de Hacienda cuando se dio el desvío en sus narices y el segundo quien le sucedió en el mismo cargo. Ninguno de los dos notó la falta de 250 millones de pesos pues.
¿Quién en el PRI está tan enojado con Manlio, Videgaray y Meade y además tiene información de primera mano y el poder para presionar a un priista para que confiese un desvío millonario que puede socavar como lo ha hecho la campaña tricolor?
¿Se acuerdan a quien ya hacíamos muchos como candidato del PRI a presidencia, porque las encuestas decían que era el mejor posicionado?
Claro que no hacen falta más pistas para entender que el sospechoso de desatar la guerra política interna en el PRI es Miguel Ángel Osorio Chong, todavía Secretario de Gobernación y al que le hemos visto cara de ‘perro’ enojado tras el destape de José Antonio Meade.
La guerra al interior del PRI no tiene precedente, ni siquiera cuando ellos mismos mataron a Luis Donaldo Colosio y Manuel Camacho Solís parecía que se rebelaba y Carlos Salinas entonces presidente tuvo que salir un día a decir aquella frase de: no se equivoquen, el candidato es Colosio.
Hoy una frase en los mismos términos dicha por Enrique Peña Nieto serviría para nada, porque el enfrentamiento entre los principales actores del PRI nacional hace ver aquel episodio de Camacho como un berrinchito.
Hoy se trata de una acusación de desvío de millones de pesos, de un golpe directo a los dos hombres del presidente, de un estate quieto a Manlio al que nadie se atrevía a tocar, un ‘cálmense muchachos solamente va a dar más risa.
¿Si fuera Osorio, quién podría ponerle un alto?, ¿se imaginan los expedientes a los que tiene acceso un personaje como el Secretario de Gobernación?, ¿quién podría estar fuera del alcance de la inteligencia que está en manos del titular de la principal oficina en Bucareli?, ¿el presidente, nadie?.
Tal vez por eso no ha habido respuesta a los misiles nucleares que se han disparado desde casa, porque las declaraciones de Enrique Ochoa Reza son lo mismo que cualquier mal chiste ya reciclado.
¿Se han dado cuenta que fuera de Ochoa, que ya ni risa da, nadie más salido a exigir, defender o hacer frente a las acusaciones contra Manlio y compañía y nadie ha limpiado el lodo que tiene bien encochinado a Meade y Videgaray?, nombre quien se va a atrever en el PRI, sospechándose como se sospecha de donde salió el ataque.
El asunto es que mientras el tiempo de campaña avanza, Meade sigue de gris a invisible y los procesos legales avanzan, los opositores al tricolor ya se frotan las manos, porque seguro ese será uno de los temas de campaña y los debates, porque no se ve qué pueda responder el priista ante la acusación de uno de los suyos.
Ciertamente el pelito entre los del PRI eclipsó el agarrón entre los panistas, porque los azules no han pasado de arguendes en los medios, pero en el tricolor ya andan en los tribunales.
A nadie llamó Santa…
Inició el 2018 y a los aspirantes del PAN a las alcaldías Santa Claus no les trajo la que habían pedido. Por lo que se, a nadie le llamaron para decirle: eres tú.
Por eso ahora que pasó el periodo decembrino van a tener que dar el último spring los Soto, García, Nader, Pacheco, Hernández, Amor, Moreno, Zorrilla, Amparan, De la Huerta y el resto. Y es que sucede que en 10 días habrá convocatoria y al mismo tiempo encuestas y el que no creció en esta quincena que empieza, puede despertar del sueño, veremos de qué está hecho cada quien.
Comentarios:
meliton-garcia@hotmail.com
Twitter: @melitong