CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Varios municipios en Tamaulipas arrastran una situación de bancarrota acumulada por varias administraciones y los alcaldes la han ocultado, traspasando de año a año pasivos que hoy son impagables.
Su situación financiera es tan apremiante, que este año muchos tendrían que aplicar el total de sus ingresos fiscales para saldar las obligaciones.
Además, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) está solicitando a los actuales ayuntamientos devolver este año dos mil 206 millones de pesos, de los tres mil 223 millones que recibirán en participaciones, a los que también se les debe restar 698 millones del servicio de deuda y los adeudos fiscales que arrastran desde el año anterior.
Cualquier empresa que al comenzar el ejercicio fiscal tuviera ya comprometidos el 89 por ciento de sus posibles ingresos, antes de pagar salarios y servicios básicos, estaría técnicamente quebrada.
La esperanza de ayuntamientos como Ciudad Madero, Matamoros y Reynosa es la de aclarar el dinero que le exige devolver la ASF, gastado mayormente por la administración precedente y, hacer recortes financieros en pleno año electoral.
Aunque los municipios de Tamaulipas solamente manifiestan en el Servicio Estatal de Deuda 1 mil 134 millones 773 mil pesos, en documentos oficiales se detectan pasivos por al menos dos mil 900 millones de pesos más, con lo que la cuenta llega a casi cuatro mil millones de pesos, sin contar lo que adeuden de salarios, indemnizaciones, contratistas y proveedores sólo de los primeros 15 meses de gobierno de las actuales administraciones municipales.
Solamente en los presupuestos de egresos para 2018, muchos de los cuales ni siquiera cumplieron con el formato exigido por el Comité Estatal de Armonización Contable, se esconden 464 millones de pesos de adeudos fiscales anteriores o (Adefas), además de otros $100 millones del mismo tipo de pasivos que no serán pagados este año.
En los resultados de auditoría en la revisión de la Cuenta Pública 2016, cuya tercera entrega fue liberada apenas hace unos días, el órgano fiscalizador federal está exigiendo recuperaciones a la hacienda pública federal de otros dos mil 164 millones de pesos, por desvíos, aplicación indebida de fondos, daños al erario y subejercicios.
Este dinero se le pide a Ciudad Madero, Matamoros, Nuevo Laredo, Reynosa, Río Bravo y Tampico y de no ser aclarado con la documentación de que fueron erogados correctamente, deberán ser reintegrados este mismo año, por lo que algunos municipios como Ciudad Madero, Matamoros y Río Bravo estarían técnicamente quebrados, pues las cantidades exigidas representan entre el 30 y el 80 por ciento de las participaciones que esperan recibir este 2018.
Según la Secretaría de Hacienda y Crédito Público los pasivos de mediano y largo plazo documentados en el registro nacional de Deuda, representan que Altamira, Ciudad Madero, Nuevo Laredo, Reynosa, Tampico y Victoria tienen empeñadas una buena parte de sus participaciones y aunque la dependencia del Ejecutivo Federal informa el porcentaje al tercer trimestre de 2017, no informa los montos ni tampoco si habla de montos anuales del 2017.
La SHCP señala que Altamira tiene pignoradas el 28 por ciento de sus participaciones, Ciudad Madero el 2.2, Nuevo Laredo el 81 por ciento, Reynosa el 19; Tampico el 25 y Victoria el 16 por ciento.
Los municipios deben los mil 134 millones de pesos documentados en el registro de Deuda al 31 de diciembre pasado, a una tasa promedio ponderada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público del 9.4 por ciento, lo que significa un pago anual de intereses de 107 millones de pesos por año
En total municipios y los organismos públicos dependientes como los operadores municipales de agua potable, debe de los municipios de Matamoros, deben documentados mil 450 millones de pesos, con saldos al último día del 2017.
Y solamente las comisiones de agua potable o Compas, de Nuevo Laredo, Reynosa, Río Bravo y Tampico acumula 315 millones de pesos en deuda.
La relación entre los financiamientos y las participaciones en ingresos federales de los organismos de gobierno y los dependientes de estos en la entidad federativa al 30 de septiembre de 2017 llega al 20.8 por ciento del PIBE producto interno bruto estatal y en total contando a todos los organismos Tamaulipas debe el 27 por ciento de un año de participaciones
El plazo promedio de vencimiento de las obligaciones documentadas de los municipios es de 11.2 años, lo que significa que si a los 107 millones de pesos de intereses, este año deberán pagarse un mínimo de 127 millones más en amortizaciones o un total de 234 millones de pesos.
Y LO GASTAN POR ANTICIPADO
El Estudio de Desarrollo Municipal de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), señala que los municipios de Tamaulipas no tienen un área de planeación financiera funcional, un área de tecnología de la información, no están conectados con la ciudadanía en su actividad administrativa y de planeación y casi ninguno tiene una consejería jurídica eficiente.
De hecho, más de la mitad ni siquiera tienen quien les preste servicios jurídicos.
Además no tienen fondos de contingencia, no compran coberturas, ni tienen previstas la indemnizaciones por accidentes o enfermedades de trabajo o despidos injustificados.
A esos 234 millones que pagarían este año por servicio de deuda documentada, debe agregarse el pago de adeudos fiscales anteriores o Adefas, que manifiestan los ayuntamientos en sus presupuestos de egresos y que suman 464 millones más con lo que la cuenta llega a 698 millones a pagar solamente este año.
Las Adefas son compromisos pendientes del ejercicio fiscal anterior, que se cubrirán con recursos del presupuesto del año siguiente, es decir, los adeudos fiscales que se deberían pagar con dinero del 2017 se pagarán con recursos y participaciones del 2018, por lo que es una deuda de corto plazo documentada que lastra las finanzas municipales.
En el caso de Ciudad Madero que pagará este año siete millones de Adeudos fiscales del 2017, manifiesta que deja 63 millones más para que se paguen en ejercicio posterior, por lo que hay ahí un déficit fiscal, y se incumple con la Ley de Deuda y Disciplina Financiera y la Auditoría Superior del Estado debería intervenir.
…Y aún hay más
Los ayuntamientos deben pagar más 234 millones de servicio de deuda, 467 millones de adeudos fiscales anteriores, a esa suma de 701 de pesos de este año, en que recibirán solamente unos tres mil 223 millones de pesos todavía falta quitarlo lo peor, quitarle hasta dos mil 164 millones de pesos que la Auditoría superior de la federación ha pedido que se reintegren a la Hacienda Pública federal.
Aunque los ayuntamientos no están declarando deuda contingente ni adeudos a proveedores y contratistas o por servicios profesionales, los promedios histórico señalan que estos pasivos no serían menores al 10 por ciento del presupuesto ejercido en 2017, es decir, unos 300 millones de pesos.
De la revisión a la Cuenta Pública 2016, entregada en tres informes, el último de estos apenas hace unos días, se les requieres devolcuiones de dinero a Ciudad Madero por 650 millones de pesos, a Reynosa por 635 millones, a Matamoros por 791 millones, a Tampico por 35 mdp, a Río Bravo por 49 mdp y a Nuevo Laredo por 47 millones de pesos.