Un hombre de principios tiene la capacidad de soportar las inclemencias del tiempo. El tiempo de existencia en la dualidad de la vida de creer y de soñar, el marco divino que nos sujeta al Dios invisible.
Los principios se heredan, se forman, nos llevan con firmeza en el trabajo de vivir. Si vivir es un arte, morir es la obra de arte consumada. Rubén Leal Mubarqui fue un hombre de principios, formados con su padre, con su familia, conducido por un afán de distinguirse en la comunidad. Nació un 14 de octubre de 1961, graduado de ingeniero agrónomo en la Universidad Autónoma de Tamaulipas. Fue piloto aviador agrícola como su padre. Su vida profesional fue exitosa con el desarrollo de métodos de liberación de insectos benéficos de manera aérea, con el término de “Liberación de Precisión”.
Su capacidad de inventiva lo llevó a crear modelos ingeniosos de tecnología de punta en el manejo de liberación de insectos beneficios a la agricultura que atrajo la atención en aplicaciones po
r todo el mundo, compitiendo en eficiencia y calidad en países como Croacia y Senegal, alcanzando un amplio reconocimiento en países como Austria, España, Brasil, Australia, Chile, Sudáfrica, Tailandia y Guatemala, donde sus aportaciones técnicas y científicas alcanzaron un extraordinario éxito tecnológico y económico. Para la solución a los graves problemas de las agriculturas locales.
Hace unos días, después de una larga batalla contra una enfermedad, Rubén Leal Mubarqui dejó de existir.
Un hombre de principios puede soportarlo todo. La muerte, la inseparable dama de nuestras vidas. Es tan obsesiva que tarde o temprano se empareja con nosotros. Pero un ser como Rubén es leal a sus principios y deja testimonios de lo verde de la vida en un cerebro gris de inteligencia, de su lealtad a sembrar para la vida, al formar e inventar instrumentos de precisión para la liberación de los insectos beneficios.
Rubén Leal a trabajo que le rindió justos beneficios económicos, integro la Fundación Mubarqui, Institución donde invirtió solidos recursos en un sistema de tecnología de punta para la medicina de las personas de bajos recursos. Que esperamos que la voluntad de su familia y la generosidad de excelentes médicos puedan tomar el importante rol de servir a la sociedad. Lo recordamos como un gran ser humano, honrado, generoso e inteligente. Tamaulipas pierde a un hijo que dio prestigio a su Universidad y vivió en lealtad con la ciencia y la tecnología.