Como matrimonio mal avenido está el PRI de Tamaulipas con el PRI nacional, y en medio un retoño desobediente, un candidato que jura no ser del tricolor, que reniega de la marca, de los militantes y los muchos conocidos del viejo PRI que le acompañan a todas partes, pero le guste o no, con ellos llegará hoy de nuevo al estado; JOSÉ ANTONIO MEADE hará gira en tres municipios, Victoria, Tampico y Altamira.
Con un discurso más álgido, subiendo el tono y haciendo reclamos directos a sus competidores, el del chaleco rojo PRI, tendrá encuentros masivos con la militancia de un partido que no quiere, pero que lo presumen como propio. El candidato, también ex funcionario panista, seguramente será acompañado por un ex gobernador tamaulipeco priista y se deslindará de los dos que por obvias razones no podrán acompañarlo al templete, si ya copio el “yo mero” de BALTAZAR HINOJOSA, suponemos que imitará el deslinde histórico que éste hizo de los dos ex mandatarios priistas en juicio.
Sí se trata de mostrar músculo, los priistas se pintan solos, a pesar de que sea un horario difícil para la concentración de las masas en Victoria a las 9:30 de la mañana, seguramente se las ingeniarán para llenar el espacio y enviar imágenes lucidoras; en el sur, a pesar del solazo y la hora del mero medio día, igualmente la estructura les salvara los eventos, pero más allá de los llenos totales en las tres plazas, lo interesante será lo dicho aquí por el candidato MEADE, que dice que no es del PRI.
Los locales, que en espectaculares de campaña apenas si colocan la marca PRI y que casi por obligación pintan el logotipo donde apenas si son visibles las tonalidades del tricolor, tendrán que deshacerse de su trauma, aunque sea por un día, vestir y calzar el uniforme del clásico tercer lugar.
En boca cerrada
Aunque los candidatos del PAN aseguran confiar en la autoridad electoral en Tamaulipas, el dirigente de este partido FRANCISCO ELIZONDO y TOMÁS VANOYE, represente del PAN ante el INE, acusan al órgano electoral de atender sugerencias del tricolor y desatender las del blanquiazul, esto ha motivado una cascada de dimes y diretes que enturbian la organización de un debate entre candidatos a senadores y peor alebrestan las aguas de un proceso que podría prender de más el encono social.
En la nube
#Relájese.- A 31 días del día de la elección, con amigos o la familia, las discusiones crecen por las preferencias electorales, pero es conveniente respirar hondo, conservar la calma y aceptar la diversidad del pensamiento, aunque las ideologías ya ni en los estatutos partidistas existen. Tolerancia y buen humor.
@LupitaEscobedoConde