Estados Unidos.- Los estadounidenses celebran este miércoles el Día de la Independencia con fuegos artificiales, y para algunos, con un renovado sentimiento de orgullo por su nación de 242 años.
Sin embargo, para otros, la sensación de división en Estados Unidos pesa mucho en el feriado nacional por excelencia.
Desde Nueva York hasta Nuevo México, los actos del 4 de julio celebrarán lo que une a los estadounidenses.
Pero en un país sacudido por el debate sobre lo que significa ser estadounidense, hay competencia incluso en la retransmisión por televisión de los actos del Día de la Independencia en la capital, Washington DC.
La Casa Blanca ha contraprogramado la emisión de PBS del espectáculo de música y fuegos artificiales desde el West Lawn del Capitolio, con su propio concierto.
La lista de actividades es amplia: hay desde citas elaboradas como la exhibición pirotécnica Macy’s July Fourth, a otras pensadas para darse atracón como el concurso de comer “hot dogs” de Nathan’s Famous u otras más simples como una barbacoa en el patio.
La palabra “comer” es una manera de hablar, en realidad los concursantes se meten los “hot dogs” hasta la faringe. También está permitido remojarlos en agua para que las salchichas pasen mejor por el esófago. Es un espectáculo que tiene lugar cada año en Estados Unidos por el 4 de julio, el Día de la Independencia.
En el país de las porciones XXL los concursos de comida se han convertido en una disciplina propia. Esto es así también gracias a George Shea, que llama a la mesa a competidores de todo el país con la asociación Major League Eating.
Hay concursos de todo lo que se pueda comer fácilmente con la mano: pizza, hamburguesas, tacos, sándwiches, pollo, mazorcas de maíz, huevos duros, helados, roscos e incluso tarta de calabaza. Y también de forma regional puede haber concursos de comer langosta en Maine,
de patatas en Idaho y de ostras en Orleans, cuenta Shea a dpa. Detrás de los eventos suele estar un productor de alimentos que quiere promocionar sus productos.
El 40% de los estadounidenses padecen obesidad, según la autoridad sanitaria CDC. Mientras que la ex primera dama Michelle Obama fomentaba la comida sana con su huerto, el presidente actual, Donald Trump, amante de la comida rápida, representa un ejemplo de lo contrario.