TAILANDIA.- Los 12 niños milagrosamente rescatados de una gruta en Tailandia deben ahora emerger mentalmente en una difícil vuelta a la normalidad.
Estuvieron separados de sus familias durante dos semanas, privados de luz y de comida -rodeados por una agua turbia que los persiguió en los túneles hasta dejarlos en un estrecho promontorio- sin saber durante nueve largos días si serían alguna vez hallados, hasta que fueron milagrosamente descubiertos por buzos británicos.
Pese a todo, los niños están en buen estado físico y mental, según indicaron las autoridades basándose en los informes del hospital Chiang Rai, donde se encuentran en cuarentena.
Pero acecharán en los próximos meses las pesadillas, la claustrofobia, la tristeza o los ataques de pánico tras una experiencia tan traumática, coinciden los expertos.
“Después de semejante trance, el traumatismo puede emerger cuando se está en la oscuridad, en una habitación cerrada, cuando se debe pasar un escáner o incluso cuando se nada” explica Jennifer Wild, del Centro de estudios sobre la ansiedad y los traumatismos, en Oxford, interrogada sobre el drama vivido por los niños en el Science Media Centre.
La presencia de su joven entrenador del 25 años, que pasó temporadas en monasterios budistas, fue un factor tranquilizante, destacan las autoridades.
“Estaban todos juntos, como un equipo, ayudándose. Su entrenador ayudó mucho a hacer frente a la situación”, destacó este miércoles Thongchai Lertwilairatanapong, del ministerio de Salud en rueda de prensa en el hospital de Chiang Rai, donde están internados.
Los niños han sido puestos en cuarentena en el hospital, sin poder ser abrazos por sus padres. En un primer momento, éstos pueden hablarles solamente a través de un cristal.
Los expertos advierten contra los riesgos de una excesiva exposición mediática, y recomiendan evitar cualquier sesión de fotos o de entrevista de los niños, que deben ser protegidos de la prensa.
“Los niños no deberían dar entrevistas o que se les haga fotos, durante un buen periodo de tiempo” recomienda Andrea Danese, psiquiatra e investigador especializado en el estrés en el King’s College de Londres, citado por Science Media centre.
Con información de UnoTv