Pueblo Viejo.- El grave caso de la violación de un menor hace tres meses en el sector “Acapulquito” de La Congregación Anáhuac y el terrible asesinato de una pequeña de 7 años en un fraccionamiento de Altamira tuvieron algo en común, el descuido de los padres para con los desafortunados infantes.
El titular de la Procuraduría de la Defensa del Menor , Licenciado Gustavo Vargas Trujillo manifestó que estos lamentables hechos encienden los “Focos Rojos” ante la falta de atención de los pequeños los cuales no están exentos de ser víctimas de una grave situación por el irresponsable exceso de confianza de los padres”.
En este sentido el funcionario indicó “Es preocupante el nivel de vagancia de menores en diversos sectores, los niños pasan más tiempo en la casa de los amigos o con conocidos, esto mientras sus madres se la pasan en el celular con las redes sociales o viendo novelas y vienen a caer en cuenta de la ausencia de los menores cuando les sucede una desgracia como en muchos casos ha pasado”.
Por lo anterior lanzó el exhorto y una exigencia para que los progenitores no descuiden a sus hijos, que les presenten atención que les marquen horarios y se hagan responsable de ellos para que no estén expuesto a cualquier situación en la calle en donde pueden toparse con viciosos, pervertidos o gente que por placer hace daño. Citó que los descuidos de este tipo se encuadran en el delito de omisión de cuidados y pueden alcanzar de 5 a 6 años de cárcel para los implicados, sean padres o personas a las que encargaron a los menores.
Manifestó que los recientes casos ocurridos son terribles y en los dos hubo un factor común que fue el que los padres descuidaron a los hijos, en el primer incidente el menor fue confiado a unos conocidos y en el caso de la pequeña esto le ocurrió en su propio domicilio lo que demuestra que solo bastan minutos para marcar o terminar con la vida de un pequeño.