MATAMOROS, TAMAULIPAS.- La violación de los derechos humanos por parte de las autoridades de Migración de los Estados Unidos, en el Sur del valle de Texas es muy constante.
Y un caso reciente que ha llamado mucho la atención a nivel mundial es el de las familias que son separadas, el de los niños que son alejados de sus padres y confinados prácticamente en una prisión.
“Esto es algo muy grave, pero lo es más la mala atención que se les da a esos menores de edad”, dijo Juan Antonio Sierra, quien es encargado de la Casa del Migrante San Juan Diego y San Francisco de Asís, A.C.
Pero no sólo existe este tipo de violaciones a los derechos humanos, pues hay también otros casos que han llegado a las agresiones graves en contra de los migrantes.
Recordó que hace dos años, antes de la garita migratoria de Sarita, Texas, elementos de la Patrulla Fronteriza agredieron a un connacional, a quien incluso le pasaron por encima una cuatrimoto.
“Se trató de una persona quien es originaria del sur de Veracruz, y a quien le fracturaron sus dos piernas, así como un brazo, pero además, tuvo problemas con su cadera”, recordó.
Otro de los casos más recientes sucedió en mayo, cuando un grupo muy numerosos de connacionales fueron dejados debajo de un avión, bajo una tormenta muy peligrosa, pues despedía rayos.
Sobre estos dos casos, aseguró que se le informó a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, donde tomaron conocimiento de los casos; sin embargo, como se trata de autoridades norteamericanas no pudieron hacer nada.
En este sentido lo único que realizaron fue comunicarle lo sucedido a los respectivos consulados mexicanos, para que desde ahí protestaran y exigieran justicia, pero desafortunadamente, los consulados de México en Estados Unidos poco hacen, por no decir nada, para defender los derechos humanos de los connacionales.