CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Hace años lloraba por una oportunidad que no se le presentaba y, ahora, cambió esas lágrimas de sufrimiento, por las de alegría. Luis Ángel Paz Herrera, mejor conocido como ‘Cocoyo’, cumplió el pasado miércoles uno de sus objetivos en el fútbol profesional, debutar con un equipo del máximo circuito y, lo hizo con el Puebla, en la Copa MX.
No hace mucho tiempo jugaba en las ligas locales, como Copa UAT de Victoria. En ese momento, por más que se esforzaba, no llegaba el tiempo de mostrarse en un equipo de primera, “cuando estaba solo, decía ‘yo quiero una oportunidad, ¿por qué no me llega?’, lloraba mucho, quería estar en unas fuerzas básicas, lloraba en la regadera para que mi familia no me escuchara”.
El pasado 25 de julio, también estuvo en una regadera, con algunas lágrimas en el rostro, pero fueron después de debutar en el mítico, Estadio Cuauhtémoc en un duelo de Copa Mx, con el primer equipo de Puebla, cotejo en el cual disputó 22 minutos; “La verdad sí lloré después del partido, viví algo que buscaba desde hace mucho, algo que era mi
sueño”, señaló el victorense a Oé!.
Hoy puede contar con mucho orgullo, que gracias al trabajo pudo conseguir una de sus metas, siendo la noche del 25 de julio, un momento que, “nunca voy a olvidar en mi vida, una noche de ensueño”.
Un duro camino
El victorense, Luis Paz, tuvo que pasar de todo en el fútbol profesional; cuando militaba en Correcaminos de la Tercera División, ‘Cocoyo’ recibió por fin esa oportunidad que buscaba, para mostrarse en un equipo de primera, dejó al ‘Corre’ y fue a Pachuca, pero al final, por cuestiones de papeleo, no pudo llegar con los de la Bella Airosa.
Sin Correcaminos y Pachuca, Luis tuvo que buscar un equipo de manera urgente, pues se quedaría sin jugar seis meses, no era una opción y, fue cuando encontró la puerta abierta en Matamoros, con Gavilanes, en donde estuvo con el cuadro de Tercera.
Una interrupción -tal vez la mejor en su vida-, cuando estaba en el cine, le cambiaría todo; la misma persona que lo ayudó a ir a Matamoros, le habló para informarle que tenía la opción de probarse en Puebla, era ‘todo o nada’, pues si dejaba a Gavilanes, ya no iba a poder regresar.
Se arriesgó y fue a la ciudad camotera a pelear por un lugar; hubo por lo menos 500 jugadores a prueba; varios días de filtros y al final, él fue de los pocos que se quedaron directo en el equipo Sub-17.
El que persevera, alcanza
A ‘Cocoyo’ le tocaron los momentos más complicados del Puebla, pues estuvo en la era en donde los dueños no cumplían con los pagos con los de primer equipo, mucho menos con los del cuadro de la Sub-20 y Sub-17.
Aún así, junto a sus demás compañeros supo soportar y, como dice el dicho, “el que persevera, alcanza” y, tras varios torneos con la Sub-17 y Sub-20, dos años después de su llegada, Luis Paz obtuvo su oportunidad de debutar al mando de Enrique ‘Ojitos’ Meza.
Para él fue una total sorpresa, pues en pretemporada no estuvo con el equipo de la Liga Mx, “no tuve la fortuna de estar con el primer plantel (en pretemporada), hasta dos días antes del juego me llamaron para entrenar, después el martes también”, comentó.
Ese día era el clave, pues iban a publicar la lista de convocados tras el entrenamiento y cuando pasó a ver, estaba su nombre y número, “sentí mucha felicidad, sabía todo el esfuerzo que había hecho y sabía que podía ser día de mi debut, era una oportunidad que no podía desaprovechar”, puntualizó.
Luis no podía con su felicidad y en automático, quiso comunicarse con el que es su más grande motor en la vida, su familia, “al primero que le llamé fue a mi papá, a mi mamá, después a mis hermanos, son personas muy especiales, junto a mi novia, que siempre me han apoyado”, dijo.
‘El Día D’
Tras conocer que estaría en el juego y con posibilidad de debutar, Luis, por momentos perdió el sueño una noche antes del partido; el nerviosismo lo invadía, pero con el paso de las horas, la ansiedad de ya estar en el campo ganaba terreno.
El estar en una concentración con el primer equipo, es parte de lo que no olvidará, “la charla, comer con los compañeros, todo fue una experiencia que no había vivido y que siempre voy a recordar”, declaró Luis.
El juego comenzó, eran los Venados los rivales; más de 3,000 personas eran las que se encontraban viendo el duelo en el estadio; llegó el momento del debut, al minuto 65, recibió las indicaciones de Juan Reynoso y Enrique Meza, entregó el tarjetón de cambio y, a los 68 minutos, hizo su entrada oficial, para pisar el campo por primera vez, en un duelo oficial con el primer cuadro de la Franja.
Cuando entró, cuenta entre risas que no se intimidó por el ruido de la gente, “no escuchaba nada más que los gritos del profe, Juan Reynoso”.
Al momento de estar en el campo, fue inevitable no recordar los momentos grises que tuvo, las faltas de oportunidades, las cerradas de puertas, entre otras cosas, “pasaron
cosas buenas y malas por mi mente, todos esos sacrificios habían valido la pena”, expresó.
El juego terminó y tras asimilar el momento y varias lagrimas de felicidad, fue felicitado por jugadores del plantel. “El plantel me apoyó, me dieron motivación, consejos, jugadores de experiencia como Zamora, Tabó, ‘Macue’ Robles, sentía muy buena vibra y en sí, todos nos felicitaron a los que debutamos”, señaló.
Por su parte, el ex técnico de la Selección Mexicana, Cruz Azul, Pachuca, campeón varias veces del fútbol mexicano, Enrique Meza, entrenador que le dio la confianza, “me felicitó, dijo que había hecho un buen juego y que siguiera trabajando al doble, para cuando se diera la oportunidad de nueva cuenta, estuviera listo”.
“Fue una noche que siempre voy a recordar, tuve la pelota varias veces y creo que lo hice bien, cumplí mi más grande sueño, me sentí demasiado feliz y, creo que sí, es el mejor día de mi vida en el fútbol”, añadió.
Todo empezó con una ilusión
Cuando estaba chico, de niño, recuerda ver la tele y a los jugadores, algún día quería estar del otro lado y varios años más adelante, la vida y Dios lo recompensaron con ello, para ‘Cocoyo’, el fútbol lo enamoró y todo comenzó con una ilusión y sueño que con el paso del tiempo, se vio cristalizado.
“Todo empieza como ilusión, tal vez no sabes si va a pasar, pero sí lo sueñas. Yo de niño quería verme en la tele jugar, en un campo hermoso, grande, como el Cuauhtémoc, imagina la satisfacción que tengo”, destacó.
Dedicado a familia, a Victoria y a la Libertad
En los barrios de la Libertad, ‘Cocoyo’ creció e hizo gran parte de su vida hasta su salida a Matamoros y Puebla. Tiene grandes amigos en su barrio y es a ellos a quienes le dedica este logro, claro, sin olvidar a su familia, lo más importante para él.
“Siento mucha felicidad porque he vivido muchas cosas, sacrificar familia, amigos, estar lejos de tu casa. La verdad que se sentía el apoyo de todos aunque estaban lejos, suma mucho que la familia esté apoyando y amigos, me imagino como estaban todos en la Libertad -entre risas-, tengo grandes amigos también en otros lugares, esto es para ellos, mis papás, hermanos, mi novia, todos”, declaró.
Ahora piensa en la Liga Mx
Ya cumplió uno de sus objetivos y, aunque no se emociona de más, ya piensa en su próximo paso, que es debutar en la primera división (Liga Mx) con la Franja del Puebla.
Pero para ello, tiene que aprovechar como lo hizo el pasado miércoles ante Venados, los minutos que le den en Copa MX, “hay que mantenerse en este ritmo, jugar con la Sub-20 y
cuando se dé la oportunidad en la Copa MX, porque lo que quiero ahora es estar en la Liga Mx”.
Dejó en claro que no dejará de trabajar, pues sabe que no ha conseguido nada, “quiero tener más momentos así, así que tengo que entrenar y esforzarme al doble para mantenerme y mejorar”, finalizó.
Luis Paz, seguirá con el equipo Sub-20 de Puebla, pero posiblemente continúe siendo habitual con el cuadro poblano en la Copa MX, por lo que puede ser una puesta en escena para que se muestre y pueda ser considerado para tener minutos en la Liga MX.




