San Fernando, Tam.- Pescadores de la Laguna Madre, vienen enfrentando serios problemas para recuperar el dinero que invierten en el pago del combustible que utilizan para acudir a capturar escama o camarón, debido a que con los fuertes calores no se está obteniendo grandes cantidades de producto.
Además de que las vedas de camarón y tiburón que son impuestas por las autoridades federales de la Conapesca desde un escritorio, así como los efectos de la canícula, mantienen desesperado al sector pesquero.
Cabe mencionar que desde el mes de mayo pasado a la fecha, más de 5 mil familias de pescadores viven un viacrucis para tratar de sobrevivir al no poderse capturar las especies acuáticas en mención, que les permita llevar el suficiente sustento diario a sus viviendas.
Cabe señalar que posteriormente a las vedas oficiales de estas especies, los pescadores viven la veda natural de la canícula al mermar drásticamente la captura de especies de escama, jaiba y camarón durante los 45 días en que dura este fenómeno natural.
Asimismo se dio a conocer durante la canícula el camarón, así como la jaiba se entierran entre las arenas y el fango de los canales de navegación, barras y bayucos, en tanto que las especias de escama emigran a las profundidades de las aguas del Golfo de México, para protegerse de las altas temperaturas que se tienen en el vaso lacustre, lo que impide su captura.
Aun cuando no hay suficiente captura y no estén sacando ni el dinero que invierten en el pago del combustible que utilizan para acudir a desempeñar sus actividades, los pescadores acuden con la esperanza de obtener algo que llevar a sus casas.