Una de las actividades que mucho caracterizó al pueblo de Llera, fue el béisbol, orientado y manejado por don Guadalupe Reyes, un personaje que le dio un fuerte impulso a este deporte, que llegó incluso a convertirlo en el mejor de todos, como sucedió también con otras disciplinas, entre estas, el volibol y el básquetbol.
Si mal no recuerdo, esto ocurría allá por los años cincuenta del siglo pasado.
Después, tocó en suerte a don Juanito Rodríguez, titular de la oficina de telégrafos, reimplantar el fútbol y, posteriormente, otros deportistas trajeron, entre otros, el atletismo, como el ciclismo.
En fin, había en esos años bastante actividad deportiva, al grado que Llera estaba considerado como uno de los municipios deportivos, más importantes en Tamaulipas.
Se hacía deporte en la calle, en la escuela y en la casa.
No había campeonato estatal o nacional, donde no participara el pueblo de mis mayores.
Hoy, todo ese deporte ha ido poco a poco a la baja, pues pocos jóvenes, incluyendo adultos, se fueron alejando del deporte, salvo honrosas excepciones.
Pues bien, traigo a colación lo anterior, porque sería estupendo que una autoridad civil o social, rescatara el deporte en todas sus manifestaciones.
Pero también, al mismo tiempo florecieron los concursos de oratoria, poesía y los estupendos concursos de belleza que llevaron a Llera, a participar en eventos nacionales como internacionales, conquistando nuestro municipio un Segundo Lugar, que nadie ha logrado superar.
De los oradores más destacados y, que no se olvidan, recordamos al profesor Guadalupe Villanueva Inglés y, al Licenciado José Ascención Maldonado Martínez.
Entre las bellezas que recordamos, están entre otras, La Chata Vitales, Gloria Gordon, Ludivina Echavarría y Gloria Tovar, entre otras.
En fin, son muchos los jóvenes, hombres y mujeres que le dieron bastante realce a nuestro municipio.
Traigo a colación lo anterior, porque sería formidable que esta clase de eventos se volvieran a realizar dentro de la escuela y, como en años anteriores, Llera se
convirtiera en el centro de estas actividades.
Por lo tanto, Héctor de la Torre Valenzuela, maestros e instituciones locales, tienen la palabra.
Pero también, cada municipio vecino al nuestro, podría hacer lo mismo y, de ser así, entonces se daría paso a un concurso estatal, sumándose a estas disciplinas, el baile popular y la declamación.
Creo será sensacional ver en noble justa compitiendo por ejemplo a Ocampo, González, Xicotencatl, Tula, Jaumave, Gómez Farías, sólo por citar algunos nombres.
A propósito, ayer sostuvimos una amena conversación telefónica con el profesor Alfonso Roque Rodríguez y, nos comentaba que tanto la ciudad de Ocampo donde vive y, la
carretera estatal que la une con el resto de Tamaulipas, están en magníficas condiciones de tráfico e incluso, este es tan seguro como tranquilo, que resulta una hermosa novedad transitar por ella y disfrutar del rico paisaje que ofrece, por lo tanto y atendiendo su atenta invitación, por ahí vamos a andar un día de estos, pues carambas, palabra que no le vamos a hacer el feo a un buen filete de cecina asada al carbón y a una de sus sabrosas, como gigantes paguas.
Saludos para toda la raza de la antigua Santa Babara.
HASTA MAÑANA Y ¡BUENA SUERTE!