Las lluvias, depósitos abandonados con agua y el matorral que invade un buen número de solares, son hasta hoy los atenuantes que permiten la formación de un gran número de zancudos y jejenes, pero inexplicablemente, no hay autoridad alguna que trate de exterminarlos, pues por el contrario, tal parece que promueven su creación sin importar lugar o ciudad alguna y, para ejemplo, ahí tenemos Llera y ciudad Victoria, donde la sociedad no haya qué hacer, en tanto que las autoridades responsables de la salud en sus tres niveles de gobierno, poco les importa esta invasión de moscos, razón por la cual, no sólo cuestionamos, si no que exigimos un verdadero combate al zancudo, como al jején.
Ojalá las autoridades a quienes dirigimos este mensaje, hagan algo o de lo contrario, les vamos a echar la perra encima. Primera llamada.
Ayer, atendiendo una invitación de Héctor de la Torre Valenzuela y del titular de prensa, Jesús Eduardo Villarreal Torres, para estar presentes en una reunión de gente relacionada con el Turismo del estado, celebrada precisamente en el balneario La Peñita, logramos saber del formidable proyecto que impulsa el ayuntamiento para atraer paseantes y vacacionistas a los centros de atractivo natural, con que cuenta el primer municipio de Tamaulipas, fundado por mi compadre don José de Escandón y Helguera y, donde por cierto, se dio a conocer la idea de mejorar el citado lugar, creando un magnífico como amplio estacionamiento vehicular, precisamente para evitar que los muebles automotrices invadan el terreno perteneciente a los bañistas, grupos sociales y familias que han tomado el lugar, como una esfera de descanso y diversión cuya fama ya cruzó, no solamente Llera, sino también Tamaulipas y, ahora el nombre de nuestro pueblo, se escucha en una buena parte de América, lo que da una idea de la mucha importancia turística que está alcanzando, el municipio que me vio nacer.
A propósito, estuvimos a un paso de no asistir a dicho evento, debido a que una persona que presta sus servicios dentro del propio ayuntamiento, nos hizo saber que la reunión era de carácter exclusivo y, por lo tanto, no estábamos invitados, pero debido a que un regidor de la comuna nos pidió lo lleváramos en nuestro vehículo, fue así como llegamos a La Peñita y, ya en ese lugar, Héctor, no sólo nos invitó a tomar un lugar a su lado, sino que también agradeció en público nuestra asistencia, de donde por cierto, a la hora nos retiramos por la necesidad y urgencia que teníamos de estar en la ciudad capital, como así se lo hicimos saber a Héctor.
Lo importante de todo esto, es la estupenda información que nos hizo llegar el propio alcalde y, que no sólo agradecemos, sino que también aplaudimos, pues el proyecto de marras es cien por ciento excelente, como realizable. ¡Enhorabuena!
A propósito, nos encontrábamos ayer en la ciudad capital, cuando una persona amiga de esta tribuna nos habla por la hebra para informarnos, que una amplia área que se encuentra vecina a La Casa de la Cultura, estaba ardiendo debido a un descuido, por lo que la autoridad municipal y vecinos habían unido esfuerzos para combatir el incendio, por lo que según parece, se había solicitado apoyo a Protección Civil de Victoria.
Afortunadamente la quemazón no pasó a mayores, lo que nos recuerda que hace alrededor de dos que tres días, habíamos estado comentando sobre esto y recomendábamos se extremaran las precauciones, así como también el ayuntamiento invitara a los dueños de casas y predios a mantenerlos limpios de maleza, a fin de evitar una desgracia de estas.
Ojalá la gente ponga atención a este llamado, pues no deben de olvidar que pueden hasta perder sus casas y pertenencias.
HASTA MAÑANA Y ¡BUENA SUERTE!