Tal parece que a los priistas de Tamaulipas, a los que piden se haga el cambio de dirigencia estatal del PRI y que sea el CEN quien designe al nuevo presidente de ese partido, se les va a cumplir.
El cambio se dará antes de octubre y la designación del nuevo dirigente se dará desde el Comité Ejecutivo Nacional del tricolor.
Atenderán la petición de los tricolores de Tamaulipas en el CEN, una porque ya es tiempo de la renovación y otra porque son muchas voces las que exigen que SERGIO GUAJARDO, de una vez por todas, desocupe la silla, que deje de fungir, ¿o de fingir?, como dirigente del PRI en Tamaulipas porque en su cuenta tiene el haber sido el peor presidente que ha tenido ese partido en toda la historia.
Una de las voces que se han escuchado es la del coordinador de los diputados locales del PRI, ALEJANDRO ETIENNE LLANO, pidiendo que la nueva dirigencia estatal de ese partido sea designación directa del Comité Ejecutivo Nacional para evitar confrontaciones y desgaste al interior, y tiene razón, no están para andar con más complicaciones.
Lo que requieren en estos momentos es un presidente de unidad porque si se van a una elección los problemas comenzarán desde antes de la votación y quedarán peor de lo que están.
Por lo tanto puede ser mejor opción hacer lo que siempre habían hecho, que sea por designación, acatar la instrucción que llegue desde la CDMX, unirse y ponerse a trabajar, ya experimentaron con una elección y el resultado fue desastroso, es lo que tiene al tricolor al borde de su sepulcro.
Para dirigir al partido se han escuchado muchos nombres, incluso algunos de los que piden se dé el cambio de dirigencia quieren ser los elegidos, pero el indicado además de tener la venia nacional, para que luego no los dejen a la deriva, igual debe ser capaz de aglutinar a todos los liderazgos y visualizar el reto que tienen en frente que no es otra cosa que la elección del 2019, de lo contrario corren el riesgo de quedar sin representación en el Congreso local, bueno, sin diputados de ese partido.
En los últimos días el de MIGUEL MANZUR NADER sonó, se dijo que él podía hacer la alianza PRI-MORENA que se visualiza para el 2019 en Tamaulipas por la relación que su suegro tiene con ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.
Incluso vimos a MANZUR NADER en la capital tamaulipeca platicando con un operador y ex presidente estatal del PRI, la renovación del tricolor era tema.
Pero hace dos días vía telefónica el propio MIGUEL MANZUR NADER nos despejó la duda y comentó que el PRI ya no es su prioridad, que anda muy ocupado atendiendo sus negocios, quién sabe si sean ciertas sus palabras y en realidad no le interese o lo dicho sea porque ya le dijeron que no será el elegido, que igual la alianza puede darse pero con otros actores.
Ayer desde el centro del país nos aseguraron que sí será designación la llegada del nuevo presidente del PRI y que es alta la posibilidad de que el elegido sea un victorense, que los astros se están alineando a su favor.
Aseguran que quien tendrá la voz cantante al respecto es nada más ni nada menos que el ex Secretario de gobernación, MIGUEL ÁNGEL OSORIO CHONG.
Después de saber que OSORIO CHONG será el que dé el visto bueno para Tamaulipas, ¿qué personaje se le viene a la mente?, exacto, el aún delegado de Comunicaciones y Transportes de San Luis Potosí, oriundo de la capital tamaulipeca, CÉSAR GARCÍA CORONADO.
CÉSAR GARCÍA es quien encabeza la lista de los prospectos para la dirigencia estatal del tricolor, tiene sentido porque es amigo personal de OSORIO, conoce cómo se trabaja el PRI, también lo que se debe hacer para enmendar el partido, vaya, puede gestionar dinero y tiene ganas de dejar huella, recurso económico a CÉSAR no le faltará, interés porque el tricolor de sus amores con el destaque tampoco, así es que sí, sí es probable su llegada.
En fin, la situación es que les harán caso a los priistas de Tamaulipas, pronto tendrán nuevo dirigente, el elegido será por designación directa del CEN, anotan a CÉSAR GARCÍA para el PRI.