CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Los presidentes municipales electos de Nuevo Laredo y Tampico, coincidieron al aceptar el regreso de la Policía Preventiva a las principales ciudades de la entidad.
En cambio alcaldes electos de Padilla y Ciudad Victoria, fueron más prudentes, aunque reconocieron la necesidad de tener esta corporación que tenga mayor cercanía con la ciudadanía.
Óscar Enrique Rivas Cuéllar, presidente municipal electo, reconoció que en la experiencia del primer periodo de su administración existe una área en materia de violencia intrafamiliar que debe ser atendida.
“No contamos con elementos que puedan atender esos casos y haga presencia la autoridad y de esta manera, una policía preventiva o de proximidad, como se le asigne, vendría a cubrir esa tarea que hoy necesitamos en los municipios”.
Sobre ello, Jesús Nader, alcalde electo de Tampico, dijo que si bien existe una prioridad en el renglón de seguridad, es bien vista la posibilidad que retorne la Policía Municipal a la zona sur.
Coincidió con el Alcalde de Nuevo Laredo en el sentido que, debe haber un proceso de capacitación y certificación de elementos de la Policía Municipal para que salgan a las calles.
Algo que admitieron los alcaldes es que, para aterrizar esta estrategia, los municipios de mayor población deben tener más acceso a recursos para cubrir las necesidades que implica sostener una corporación local.
Para Eduardo Alvarado, alcalde de Nuevo Padilla, si bien es una realidad que se requiere la Policía Preventiva para atender diferentes eventos del fuero común o violencia familiar, “¿con qué podemos mantener esa policía?”, señala.
Estima que los municipios grandes, serían los más interesados en retornar a la Policía Municipal. “El problema sería lo económico, no sé si estaríamos en condiciones de cubrir los salarios e insumos que implica que opere nuevamente Policía Municipal”.
Por ello es necesario recibir más apoyo policiaco y en especial municipios como Padilla, donde los índices de inseguridad están elevados.
Aunado a ello, dijo, una de las adversidades en las que coincidieron los alcaldes del sur del Estado junto con Eduardo Alvarado, es que en los municipios no existe infraestructura municipal para que vuelvan a operar las policías, por lo que sería prioritario invertir en ello.