CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Pese a que en los últimos seis años y medio solamente a Tamaulipas han sido introducidos y vendido unos 50 mil vehículos ilegales y el comercio informal funciona con mercancía de contrabando, el número de acusaciones por dicho delito es mínimo.
De las mil 518 carpetas de investigación que según datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública, por delitos fiscales, solamente un tercio de estos son por contrabando y la mayor parte en las aduanas y contra personas que importaron cantidades reducidas de mercancías prohibidas.
En el comercio informal en todas las ciudades de Tamaulipas, se vende ropa nueva y usada, electrónicos, tabaco y bebidas alcohólicas de contrabando, que frecuentemente son falsificados.
Según la revista Proceso, en 2015, investigadores y organizaciones ciudadanas del estado de Tamaulipas se quejaron de que grupos delincuenciales han pasado de la economía ilegal a la economía informal y protegen el contrabando desde ropa usada hasta vehículos de lujo o armas sofisticadas, sin que haya acciones reales en contra del contrabando.
A tres años de la denuncia las carpetas de investigación por contrabando lejos de haber aumentado han disminuido
Previo a la declaración que convertiría a la frontera en una Zona Franca o Zona Económica Especial, la Procuraduría General de la República afirma que ahora sí ira contra la red de corrupción en las aduanas fronterizas.
Junto con la desaparición de las garitas aduanales en los márgenes de las zonas fronterizas, también disminuyeron los delitos por violaciones al Código Fiscal, de 366 en Tamaulipas en 2013 a solamente 140 en 2017 y el 70 por ciento de estos 140 no fueron hechos de contrabando.
La Confederación de Asociaciones de Agentes Aduanales de la República Mexicana (Caaarem) aseguran que por todas las aduanas del norte del país ingresan todos los días docenas de vehículos no importados, armas, electrónicos, electrodomésticos y todos tipo de mercancías.
No se sabe que el Sistema de Administración Tributaria o la Dirección General de Aduanas hayan practicado operativos para verificar la documentación de importación de los productos que se expenden en puestos callejeros, tianguis o por las redes sociales.
Además de que el de contrabando abunda la venta de productos pirata o falsificados, que se venden con marcas conocidas.
Otro de los grandes negocios son las pacas de ropa usada, las cuales no podrían ingresar al país por el peligro de contagio de enfermedades o de fauna nociva, pero abundan los tianguis donde hay una enorme cantidad de puestos que venden este tipo de ropa, pese a que esta venta debería ser vigilada por la Comisión Estatal para la Protección de Riesgos Sanitarios.
Los decomisos de contrabando en el barrio de Tepito en Ciudad de México, han establecido que una de las rutas de entrada de estos artículos se ubica en la frontera de Tamaulipas, a una distancia de mil kilómetros.
En todo el país la venta de licor y cigarrillos ha sido detectada, pero la acción penal se ejercita contra los vendedores y no contra la red de la que los puestos son el último eslabón.
Ex funcionario del municipio de Matamoros, ha sido objeto de dos detenciones por contrabando de cigarrillos y licor, la última vez en mayo pasado, sin que se sepa que se haya investigado a fondo el caso.