Ahora el partido se llama Tamaulipas, la frase sintetiza de cabo a rabo la gira del presidente electo Andrés Manuel López Obrador por Victoria y Tampico y, con ella, el tabasqueño dejó bien claro, que por encima de cualquier deseo personal o de grupos políticos, está el interés de la entidad y las autoridades legalmente constituidas.
Así es, mis queridos boes, la de ayer, entre el gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca y López Obrador en Palacio de Gobierno, fue una reunión cargada de cortesía, de mensajes directos, de señales de un futuro que no asoma confrontación, revanchismo o sometimiento, como algunos apostaban.
“Fue una muy buena reunión, se llegó al acuerdo de trabajar de manera coordinada para el beneficio del pueblo de Tamaulipas, esa es la esencia de este encuentro, mostrar nuestra voluntad y hacerlo de manera conjunta”, dijo el tabasqueño.
“Fue muy buena la conversación con el ciudadano gobernador, ese fue el propósito, es realmente un estado con muchos recursos, con mucha potencialidad y también con un pueblo y eso es lo más importante, bueno, un pueblo trabajador. Vamos todos juntos a sacar adelante al pueblo de Tamaulipas aquí los poderes en Tamaulipas están legalmente constituidos y el titular del ejecutivo, el responsable del poder público en Tamaulipas, es el gobernador y yo agradezco mucho al ciudadano gobernador, a Francisco por su respeto desde que triunfamos”.
Esas palabras de AMLO, retumbaron ahí adentro del palacio, luego de la reunión privada, ya con el gabinete estatal, ahí con los diputados y senadores e invitados, ahí frente al próximo Súper Delegado, José Ramón Gómez Leal.
Si alguien quiere buscarle destinatario al mensaje de López Obrador, seguro se lo encontrará, si alguien quiere hacer grilla con el mensaje, la podrá hacer, si alguien quiere incluso pensar que dichas palabras fueron mera cortesía, igual lo puede hacer.
Pero la realidad, es que el mensaje iba para todos los presentes, para los del gobierno de Cabeza de Vaca, que pudieran tener dudas de si se va a poder trabajar junto al nuevo gobierno federal, porque unos son panistas y otros morenistas, se puede pues.
El mensaje iba para los morenistas ahí sentados, la mayoría ex priistas, buena parte de ellos que en voz baja, pero convencidos de que son enemigos del régimen estatal, esperaban señales de venganza desde la esfera nacional, no hay venganza hay trabajo de la mano.
El mensaje es para los que han querido creer que el súper delegado será un gobernador en paralelo, un funcionario que aunque sea designado tendría mayores potestades, mayor poder, mayores atribuciones que a quien los tamaulipecos eligieron en las urnas hace más de dos años.
Pero el destinatario más importante en los menajes de ayer, debe ser el tamaulipeco de a pie, usted y yo que desde fuera vemos el trabajo de los políticos y sus resultados: ambas partes están en el ánimo del trabajo conjunto, del trabajo coordinado, del trabajo que tiene como meta el desarrollo y el bienestar de Tamaulipas.
Por principio de cuentas, es una muy buena señal, señal clara que tiene que convertirse en resultados, en hechos, en obras pues, en programas de asistencia social responsable, en estrategias de seguridad que nos regresen al cien por ciento la tranquilidad, que hace más de k a década nos quitaron y, que el esfuerzo estatal, poco a poco ha ido resolviendo.
Se quedan con palmo de narices, aquellos que ya tenían listas las grabadoras de sus celulares, esperando un discurso del electo reclamando, amenazando y advirtiendo, ayer se habrán dado cuenta que la contienda, al menos entre el poder estatal y el del gobierno que viene, quedó atrás.
Se quedan con las ganas también, quienes esperaban de la parte estatal un discurso de reclamo de límites políticos territoriales, porque lejos de eso, Cabeza de Vaca agradeció de antemano los proyectos que el Presidente electo ha anunciado para Tamaulipas, que por añadidura, dejarían miles de empleos y desarrollo en infraestructura, por estas tierras.
La inversión del gobierno de López Obrador en Tamaulipas, dicho por Cabeza de Vaca, será histórica, por lo que ahí públicamente, le agradeció al doble.
De las señales visuales del encuentro, habría que decir que el gobernador y AMLO, se mostraron sonrientes y amigables entre sí, en todo momento, incluso hay imágenes del interior de la reunión donde se aprecia, que no hubo un solo pero en el encuentro.
Más tarde AMLO, tuvo su cita con los suyos allá en el sur, en Tampico, donde miles lo vitorearon, ante quienes reiteró sus promesas de campaña y su ya clásico no les voy a fallar.
Fue pues, una gira redonda, de la que los tamaulipecos tendríamos que salir con la esperanza de que todos están comprometidos a trabajar de la mano, por y para Tamaulipas.
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