REYNOSA, Tamaulipas.- Ante las situaciones de violencia que se han presentado en Reynosa, la Secretaría de Seguridad Pública implementó una nueva fase en la estrategia de seguridad, en la que elementos de fuerzas especiales realizan intervenciones nocturnas en colonias de alta incidencia delictiva.
De acuerdo con el Secretario de Seguridad Pública, Contralmirante Augusto Cruz Morales, la estrategia ha logrado replegar a los delincuentes en áreas focalizadas, “cuando yo llegué, se instalaron cinco filtros, tapándoles las entradas y salidas a los delincuentes, el campo de batalla estaba allá y logramos sacarlos, se pegan afuera, evitando con ellos daños colaterales”.
En esta ciudad se encuentran alrededor de 500 policías estatales, aunque se requiere un promedio de mil 200, por lo que, explicando que se está haciendo un reforzamiento con más elementos estatales, “casi la mitad de los que salen, se van para Reynosa”.
A estos elementos que trabajan en coordinación con elementos federales de la policía, Sedena, Marina, PGR y Procuraduría General de Justicia del Estado, se les unirán integrantes de la Policía de Fuerzas Especiales.
De acuerdo con el Secretario, para atender la problemática en esta ciudad fronteriza, primero se hizo una vigilancia para evitar que delincuentes entraran, se les replegó, “para que su campo de batalla no sea en la población, se van a pegar que lo hagan afuera”.
Como tercera fase, se realizará un barrido en las zonas conflictivas, fase en la que entrarán también los elementos de fuerzas especiales, “hay que rehacer la estrategia para atacar una serie de colonias que ya tenemos vistas para hacer barridos nocturnos”.
Los integrantes del grupo de Fuerzas Especiales de la Policía Estatal, son los responsables de coordinar acciones con las distintas corporaciones de seguridad federal y estatal para la ejecución de operaciones de alto impacto en contra del crimen organizado.
Actualmente, el grupo lo conforman 148 efectivos, quienes se capacitan en un campo de la Secretaría de Marina en la Pesca, con tácticas y armas especiales, acondicionamiento físico y disciplina, “vienen trabajando desde hace tiempo, en cada delegación hay fuerzas especiales”.
En el último trimestre del 2017, se les dotó con cinco unidades blindadas tipo Sand Cat, en las que se invirtieron 40 millones de pesos y, en el presente año, se pagarán 46 millones 153 mil 413.12 pesos en el arrendamiento de doce vehículos tipo Mamba, de alta movilidad táctica, todo terreno y resistencia a impactos de armas de fuego de alto calibre.