Tercer día de la “consulta ciudadana” de una farsa que mañana al atardecer, culminará y se darán a conocer los resultados de la misma.
Para los del futuro gobierno, no importa que sea poco confiable el resultado, no tomarán en cuenta, que una persona pudo votar las veces que quiso, es decir, que bien pudieron traer grupos de personas de casilla en casilla votando lo que los de MORENA quisieran, es más, el mismo vocero de ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, reconoció que se tuvieron fallas, pero que igual la consulta es confiable, ¿será?
De entrada, ni siquiera fue consulta ciudadana, fue una simple encuesta realizada cómodamente desde unos módulos instalados en territorio mexicano, es decir, faltaron todos los elementos legales para que realmente fuera una Consulta Ciudadana, que de hecho, solo puede realizarse a propuesta del mandatario en turno y ANDRÉS MANUEL, aún no lo es constitucionalmente, con todas las de la ley.
Solo fue un simulacro de Consulta, que la verdad, no debería tener ninguna validez o razón para definir con ella el futuro del nuevo aeropuerto, pero bueno, después de mañana que se den los resultados truqueados de la encuesta, llamada consulta ciudadana, ANDRÉS MANUEL ya tendrá a quién echarle la culpa de lo que suceda con los aeropuertos, si se continúa con el de Texcoco, si se hacen otras pistas en Santa Lucía y sigue operando el actual, todo será responsabilidad de pueblo.
Se le preguntó, por ejemplo, a ciudadanos victorenses que nada tienen que ver con asuntos políticos, si habían acudido a votar, “ni fui”, dijeron unos, “ni fue”, contestaron los que saben de los lineamientos que sustenta una real consulta ciudadana.
Y efectivamente, la mayoría de los ciudadanos ni fue a votar y ni fue una real consulta, sino una gran farsa.
Obviamente los organizadores de la “Consulta ciudadana”, ANDRÉS MANUEL, sus legisladores, seguidores y futuros funcionarios dirán, aunque los números estén inflados, porque las personas podían votar varias veces, que la votación fue copiosa, que la gente atendió el llamado del próximo presidente y decidió.
Farsa, bueno, la verdad, aunque la Consulta estuviera bien estructurada, atendiendo todos los requisitos legales y la mayoría de los mexicanos hubieran salido a votar, a final de cuentas solo un voto contaría, el del próximo presidente y el resultado terminaría siendo el que el nuevo sistema quiera y listo, pues el pueblo no tendrá acceso a los resultados reales, los que contarán los votos, si es que de perdido se toman la molestia en contabilizarlos, serán los afines a LÉPEZ OBRADOR, así es que el resultado es lo de menos, el veredicto seguramente está dado desde antes del simulacro, ya está definido el destino del nuevo aeropuerto.
Recordemos que JAVIER JIMÉNEZ ESPRIÚ, dijo, cuando cometió el delito de allanamiento en propiedad privada de una compañía que provee material para la construcción del nuevo aeropuerto, “El primero de diciembre tendrán que entregarme todos los permisos porque se les va a cancelar”, entonces, por ahí va el asunto.
Lo malo es que el capricho puede costar mucho dinero al gobierno federal, solo con la indemnización de las empresas que ya invirtieron su capital, dinero que mucho hará falta para atacar los problemas sociales y de seguridad, que tiene el país.
En fin, la situación es que con respecto a la dichosa consulta, la ciudadanía opina “ni fui y ni fue”.