Mientras a nivel global algunas naciones se ponen serias y apuran proyectos para atender la problemática del cambio climático que afecta a todo el planeta, en el México nuestro que nos merecemos, se consulta a la madre naturaleza sobre la conveniencia de una nueva ruta de transporte en el sureste. Y la madre naturaleza dijo sí, ya veremos qué nos dice el padre tiempo.
Para algunos ecologistas, el entorno natural debe permanecer casi virgen, para los ambientalistas el desarrollo de los pueblos debe estar apoyado de acciones sostenibles y sustentables, amigables con el medio ambiente, pero para los políticos de este tiempo que nos toca vivir, ambas corrientes más las tradiciones que intentan darle un lugar a los indigenistas, son muy bien aprovechadas para conseguir lo que se quiere.
El primer presidente que se ostenta como de izquierda, que sacó de los pinos al PRIAN, resultó más hábil para conseguir la aprobación a sus proyectos que los de los sexenios anteriores, gastado el modelito de las consultas ciudadanas, donde 9 de cada 10 consultados dijeron sí, buscó también la complacencia de 12 pueblos indígenas y ofrendaron a la madre tierra el tren maya. Una ceremonia por demás atípica, surrealista y hasta cierto punto fuera de todo criterio científico, (con todo respeto desde luego todas las costumbres de las comunidades originarias del sureste mexicano).
Con una inversión que muy seguramente rebasará los 150 mil millones de pesos anunciados en el inicio, la locomotora que surcará sierras, selvas y llanos de Chiapas, Campeche, Yucatán, Quintana Roo y Tabasco, inevitablemente traerá afectaciones a flora y fauna, incluso a algunos asentamientos rurales de esas localidades, además, será un proyecto que se seguirá con lupa para saber cómo se hace una obra de tal magnitud sin corrupción. Para empezar y para la colocación del primer riel o durmiente, todavía no hay sustento administrativo transparente. Todo es puro dicho.
Y fuera del incensó, el pollo, las tortillas y el aguardiente que se le retacó a la madre tierra, por todo lo demás la ceremonia pareció otro evento meramente de priistas. Y todo va tan viento en popa, que los empresarios bien desinteresados, ya le cedieron las tierras. Es el arte de meter sin tapujos y sin doblar, los proyectos políticos y económicos y reiterar el “me canso ganso”.
Ha dicho el presidente que está dando prioridad a la zona sureste, no porque él sea nativo de ahí, sino porque es la región más pobre y olvidada, así que sí de esta forma va a estar atendiéndolos, tal vez sea mejor que aún no voltee a ver al norte.
En Boca Cerrada
En ameno desayuno, compartiendo los tamales de doña Stevia, frijoles y rajas, el diputado GLAFIRO SALINAS sostuvo un encuentro de fin de año con representantes de la prensa, antes de entregar los tradicionales regalos de las posadas, platicamos del presente y futuro de la nación, de los grandes cambios que sufre la legislación y las problemáticas que se podrían incrementar para la frontera por falta de visión o experiencia política del actual gobierno federal, como empresario aduanero, ex legislador federal y ahora local, domina el tema y denota preocupación por el 2019.
@LupitaEscobedoConde