CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- El perfil del diputado que se limita a participar en las sesiones del Congreso debe quedar atrás, advierte Pilar Gómez Leal, ex titular del Instituto de Investigaciones Parlamentarias del Poder Legislativo de Tamaulipas.
Un legislador, asegura, debe ser un gestor para ser un verdadero representante de la población.
“Tienen que entender que son representantes y tienen que ir con la ciudadanía y siempre estar cercanos”, asegura la ex funcionaria legislativa, quien recientemente se registró como aspirante a la candidatura del PAN para la diputación por el XIV Distrito.
Pilar Gómez Leal se graduó de la Licenciatura en Derecho del Tecnológico de Monterrey. Su experiencia laboral incluye además de la abogacía y la práctica notarial, un paso por el negocio de las bienes raíces.
En el Instituto de Investigaciones Parlamentarias que encabezó hasta el 13 de febrero, se encargó de brindar apoyo técnico a los legisladores de todos los partidos.
“Un diputado va, nos pregunta si ellos quieren hacer una iniciativa, si ya está hecha en algún estado, si hay algún antecedente, si ya está regulado, le damos los insumos que necesitan para que ellos elaboren la iniciativa”.
Luego de ese primer acercamiento con la labor parlamentaria, asegura que los legisladores deberían ir mucho más allá de la presentación y aprobación de leyes.
“Yo creo que la diferencia es que un legislador debe estar siempre en campo, saber qué es lo que se necesita, no lo que a mí se me ocurra porque está de moda, o acaban de aprobar en no sé qué estado, que puede que al final no sirva”, dijo.
Sobre la labor que desempeña la actual Legislatura, a la cual sirvió con trabajos técnicos, destaca los esfuerzos que se hicieron para homologar reformas federales.
“Esta legislatura nos tocó mucha homologación, el ex presidente Peña Nieto nos mandó muchas leyes generales, entonces mucho de nuestro trabajo fue homologar esas leyes, el paquete del sistema anticorrupción fueron muchas leyes las que se tocaron”.
No desconoce el descrédito que arrastra la imagen de los legisladores a nivel nacional, lo cual -asegura- muchas veces tiene que ver con la falta de conocimiento sobre las labores que deberían desempeñar.
“Mi objetivo dentro del instituto era que más estudiantes fueran al Pleno, que supieran lo que está pasando, porque a final de cuentas el Congreso es la casa de los tamaulipecos”.
Y recordó que el legislativo de Tamaulipas no está entre los más costosos del país: “Si comparamos al Congreso de Tamaulipas con otros estados, no estamos en los que estén mejor pagados los legisladores, ni en que se gaste más dinero”.