PÁNUCO, VER.- Una aspecto que sigue siendo desolador, silencioso y triste es el que luce por lo menos la mitad de los comercios ubicados en el bulevar Moralillo, los cuales siguen padeciendo los efectos colaterales de la grave crisis de inseguridad que se agudizara en 2010 y que mantiene aún cerrados a 50% de los locales comerciales.
Al hablar sobre el tema el comerciante que pidió ser identificado como “el señor Rodríguez”, dio a conocer que fondas, tiendas de abarrotes,vulcanizadoras, taquerías, restaurantes.estéticas,carritos de hoy dogs,refaccionarías entre otras sufrieron el embate de incidentes de violencia, extorsiones y cobros de piso y sus propietarios terminaron por huir de la congregación al considerar que se exponían a lo peor, incluso a perder la vida, lo que hizo que a este periodo se le confiera como el ¨éxodo del miedo”.
Este panorama se extendió a la población en general y muchas familias terminaron huyendo a otros estados y pese que algunos han regresado a apostar por reactivar sus negocios, el 50% de estos están cerrados y lucen en condiciones de abandono, algunos de madera incluso se han venido abajo.
Dijo que por fortuna los niveles de inseguridad se ha reducido y la situación no están grave como años atrás, sin embargo la gente quedó traumada, muchos dejaron todo, sus casas. sus terrenos porque perdieron familiares y seres queridos y eso de alguna forma los marcó de por vida y optaron por no regresar.