CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Correcaminos tenía todo, la oportunidad era suya y la dejó ir. Con el triunfo ante el penúltimo lugar, Potros UAEM, pudo haber escalado a la tercera posición de la tabla general, pero no fue así, recibió una sorpresa en el Marte R. Gómez y cayó ante los mexiquenses por 1-2.
La expulsión de Gustavo Adrián Ramírez marcó la diferencia, pues tuvieron más de medio juego con 10 jugadores, algo que aprovechó bien Potros de la UAEM y se llevó los tres puntos.
Al inicio del encuentro, Correcaminos se mostró tibio sin mucha intensidad, y dejaba jugar a Potros UAEM, que lejos de tener un fútbol muy vistoso, les complicó a los victorenses, como balones largos.
Fue así como lograron sorprender a propios y extraños; a los 21 minutos, la defensa mandó una pelota larga, la defensa de Correcaminos se vio de primaria, los techó y el joven Daniel Tadeo definió bien en mano a mano ante ‘Gansito’ Hernández, 0-1 ganaban los de la UAEM.
Después llegó la tragedia, Gustavo Ramírez perdió la cabeza e hizo un reclamo algo fuerte al central, quien no aguantó y lo dejó sin jugar al mostrarle la tarjeta roja y eso ponía en desventaja aún más a los pupilos de Carlos Reinoso.
Pero todavía a los locales les bastó un tiro libre para empatar, gracias a un excelso cobro de Omar Tejeda quien puso la esférica pegada al poste y fue inalcanzable para el portero rival. Así se fueron al medio tiempo.
Para la segunda mitad, salió un Correcaminos desordenado y resintió más la expulsión, incluso más que en el primer tiempo; no generó muchas llegadas y se confundidos con los cambios.
A pesar de eso, con más ganas que fútbol, trataron de hacer algo, pero no pudieron; al contrario, nuevamente un error defensivo le dio espacio a Daniel Martínez quien tomó la pelota con el bote y la prendió de gran forma para hacer el 2-1, golazo que les daban los tres puntos.
Los naranjas intentaron, pero no pudieron más, se quedaron sin puntos y la clasificación a la liguilla ya no queda en sus manos.
Tendrá que ganar en Cimarrones si quiere clasificar y esperar resultados.