CIUDAD DE MÉXICO.- Pemex Transformación Industrial (Pemex Tri) promovió un amparo para aplazar la aplicación de la nueva metodología para fijar precios de Venta de Primera Mano (VPM) de las gasolinas, con el argumento de que reducirá los ingresos de la empresa estatal.
Se trata del acuerdo A/057/2018, emitido por la Comisión Reguladora de Energía el 13 de diciembre, que obliga a Pemex Tri a aplicar un descuento que recibe de refinadores de Estados Unidos, conocido como RVO, así como a informar las metodologías, costos, esquemas de mitigación o suavización de precios, pérdidas y ganancias en estas ventas.
La VPM es la que hace Pemex Tri a los permisionarios que operan gasolineras en todo el País.
En un estudio publicado en enero, la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) afirmó que la aplicación “estricta” del Acuerdo A/057/2018 es crucial para promover la competencia en el mercado gasolinero, pues acota la práctica de Pemex Tri de ofrecer descuentos diferenciados en favor de clientes que se comprometen a comprarle mayores volúmenes por más tiempo.
El 13 de marzo, el Titular de la Unidad de Petrolíferos de la CRE rechazó una solicitud de prórroga presentada por Pemex Tri, y le informó que lo procedente sería aplazar la entrada en vigor del Acuerdo, lo que solo el Pleno de la CRE puede aprobar.
Contra esta respuesta, Pemex Tri presentó el 8 de abril una demanda de amparo.
“El Acuerdo A/057/2018 causa afectaciones económicas (a Pemex Tri), dado que la aplicación de esta metodología implica minimizar los ingresos de la empresa productiva del Estado y, por tanto, del erario público”, afirma el amparo.
La Jueza Laura Gutiérrez de Velasco se declaró el 10 de abril incompetente para llevar este caso, y lo envió a un juzgado Especializado en Competencia Económica.
“El Acuerdo A/057/2018 establece un marco regulatorio con el potencial de disminuir el impacto de las medidas de mitigación de precios sobre las finanzas de Pemex y sobre el proceso de competencia en los mercados, con respecto a la regulación que le antecedió”, explicó Cofece.
“Sobre todo, le permite a la CRE tener más elementos para analizar y entender los impactos del comportamiento de la empresa estatal sobre sí misma y el mercado. Ante esta posibilidad, resulta de la mayor importancia asegurar el cumplimiento del Acuerdo por parte Pemex Tri”, agregó.
Cofece destacó que los precios en las terminales de Pemex Tri en 2018 no se movieron de acuerdo a las variaciones internacionales, pese a que importó 79 por ciento de la gasolina.
Esto se debió en parte a un esquema de mitigación de precios, ordenado por la CRE en su regulación anterior, adicional al estímulo fiscal del Gobierno.
“Lo anterior podría haber representado un desincentivo a la entrada de nuevos comercializadores ya que resulta difícil competir contra un participante que, además de ser el de mayor participación en el mercado, pudiera estar asumiendo pérdidas (que al final absorbe el Estado mexicano) mediante un mecanismo de mitigación del precio poco transparente”, explicó Cofece.
En el nuevo Acuerdo, la mitigación de precios ya no es obligatoria para Pemex Tri, y si la aplica, tendrá que avisar díez días antes a la CRE, y publicar en su portal comercial el monto de la mitigación y su impacto en el precio, así como las pérdidas o ganancias que le representen.
Pemex Tri también tendrá que informar todos los días a la CRE los precios de VPM, y desglosar los costos de logística y almacenamiento.
Con información de Debate