Aunque parece que algunos no han iniciado, ayer se cumplió el primer tercio de las campañas para la renovación del Congreso local.
Así es mis queridos boes, me atrevo a asegurar que hay distritos en los que los ciudadanos no conocen ni a la mitad de los candidatos, porque éstos pareciera que juegan a las escondidas y muestran nulo interés en ganar la contienda.
En un ejercicio rápido, ¿Cuántos recuerdan o conocen a los candidatos de MORENA y el Verde que van por Madero, Victoria, Tampico, San Fernando?, podría asegurar pocos, muy pocos saben de ellos.
Incluso buena parte de los del PRI también brillan por su ausencia. Como el caso de Ofelia Garza, que ‘compite’ por uno de los distritos de Victoria, pero que todo hace indicar que se tomó las dos semanas de vacaciones, total el pronóstico sobre su candidatura indica que no tiene la más mínima posibilidad.
¿O será que hasta ella se cree la versión de que la pusieron sabiendo que no tiene peso político, para ponérsela más sencilla al candidato del PAN Arturo Soto?.
Cuando ayer alguien me preguntaba cómo veía las campañas al cumplirse ya la tercera parte, mi respuesta inmediata fue: no parece que haya campañas, no se siente el ambiente, salvo por dos o tres candidatos.
Y si, si nos ajustamos a lo que vemos en redes, a lo que vemos en la calle, a lo que reportan transmisiones en vivo, no es una exageración decir que pareciera que solo algunos panistas están a todo lo que da en campañas.
Miguel Gómez Orta por Altamira, Mon Marón en Tampico y Arturo Soto Alemán en la capital Ciudad Victoria, con ellos Alejandro Etienne del PRI también en Victoria y Azahel Portillo del PT en Madero.
De hecho es muy evidente que la de Soto es la campaña de mayor movimiento en todo el estado, lo ha sido desde el destape en el Palenque del recinto ferial en Victoria.
Es, insisto sin exagerar, el único candidato que diario y a toda hora está en la talacha, es el que ha tenido más masivos, cómo si la campaña fuera para otro cargo… pero de futurismo luego hablamos.
El caso es que Soto gasta suela como si fuera en el último lugar de las intenciones de voto, cuando lo que se, es que trae alrededor del 60 por ciento de las preferencias.
Ya encaminado les diría que los datos que tengo por comentarios de los que dicen que saben, es que la candidata del PRI, Ofelia la que andaba de vacaciones, no tiene ni siquiera el cinco por ciento de intención y que en el segundo lugar va MORENA, muy lejos del ex Subsecretario de Ingresos.
¿Qué Arturo Soto ya está ganado?, nunca diría eso, porque las campañas son impredecibles en estos tiempos, pero que si hoy fuera la elección y yo tuviera que juzgar por lo que veo; entonces apostaría a que arrasa, ya veremos conforme avance la campaña.
Hay que recordarles, a los candidatos de MORENA, que si bien dicho partido arrasó el año pasado, lo hizo de la mano de la imagen y arrastre de Andrés Manuel López Obrador, quien no estará en la boleta, quien además las últimas semanas no las ha traído todas consigo en el tema de imagen y quien además parece que dejó solos a sus propios candidatos.
Por estos días seguramente habrá mediciones sobre la popularidad del presidente y si la tendencia se mantiene, seguro que van a registrar varios puntos menos de aprobación.
En las que se publicaron hace 15 días, la caída era en promedio por ahí de los 12 puntos, aunque MassiveCaller le daba 18 puntos menos. En 30 días si sigue bajando lejos de arrastrar a la victoria a los suyos, los podría hundir en la derrota.
El botón de muestra que indica, aún más que las encuestas, que AMLO puede estar cayendo en la aprobación popular, son las elecciones para delegados municipales en Tabasco, tierra del presidente.
Y es que ahí en Macuspana, donde el Peje dejó el ombligo, MORENA perdió ante el PRI, miren: Con 376 votos, el candidato del PRI Norberto Alamilla Pérez ganó la elección a delegado municipal de la localidad, contra Alfonso López Martínez, postulado por Morena, quien sólo tuvo 325. Insisto nada está escrito, pero hay señales dignas de tomarse en cuenta.
El compadre de AMLO…
Por cierto cuando se supo que el compadre del presidente participaba en la licitación para elaborar libros por 200 millones de pesos, López Obrador defendió su derecho a concursar, negó conflicto de intereses, ya ven que él es inmaculado.
El caso es que el compadre Miguel Rincón ganó el millonario contrato (no sean mal pensados) y AMLO insistió en que no fue favorecido, pero ante la presión ofreció investigar.
Pues ayer el empresario solito renunció al contrato, dirán que no quieren mandar malas señales, pero el golpe de dudas ya está dado, lo de ayer parecía una confesión.