Casi acaban las campañas, la etapa de las propuestas terminó (casi no hubo por cierto), el periodo no oficial de la guerra de lodo está a todo lo que da, al mismo tiempo que se entra a la etapa de la preparación del día D, que definirá el resultado de la elección.
Así es mis queridos boes, nada ha cambiado de cara al 2 de junio, si acaso las camisetas se han intercambiado, pero las estrategias siguen siendo las mismas, los operativos tal vez cambien de nombre pero en esencia el objetivo es llevar a votar a las estructuras y a los ‘promovidos’.
Si bien es cierto que las encuestas ahora dicen que el PAN ganaría de calle la mayoría en el Congreso local y que al segundo sitio va MORENA y muy rezagado el PRI, también lo es que mantener esas posiciones dependerá del trabajo que se realice el día de la elección.
El PRI va a extrañar las casas amigas, esos lugares donde el domingo por la mañana se juntaban los vecinos del barrio a almorzar barbacoa, menudo, chilaquiles y de ahí eran llevados en pequeños grupos a votar, por el tricolor desde luego.
La leyenda dice que además de recibir el almuerzo el domingo de la votación, los ‘promovidos’ por los operadores del PRI recibían raid para ir a la casilla, vía taxi o autos particulares y donde el lider no era gandalla, hasta sus 500 pesos recibían.
Ahora el tricolor no tiene con qué invitar el almuerzo, mucho menos para pagar por el voto, los operadores se fueron desde la campaña que perdió Baltazar Hinojosa contra Francisco Javier García Cabeza de Vaca en el 2016 y dudo que haya completado los representantes de casilla para el domingo de la elección; la pobreza los alcanzó.
La teoría indica entonces que la capacidad de movilización de estructuras la tiene el blanquiazul, porque además de mayores prerrogativas, desde el 2016 se viene construyendo una red de comités y subcomités que se supone están listos para operar ese día, invitando a los ‘promovidos’ a ir a ejercer el voto, por el PAN claro está.
Si las cosas se manejaran igual, entonces a partir de este fin de semana tendrían que comenzar a fluir las listas, los recursos, los simulacros para aceitar lo que no se mueva conforme a los planes.
También en teoría, MORENA y sus candidatos tendrían que tener las mismas posibilidades de movilización de estructuras, porque vienen de ganar casi todo en la elección de 2018y porque se supone que la indicación de su máximo jefe político; es decir Andrés Manuel López Obrador fue arrasar con todo.
La realidad de MORENA en Tamaulipas es muy diferente a lo que marca la teoría para un partido en el poder, sus personajes encumbrados en alcaldías, diputaciones federales y senadurías, además de cargos federales simplemente y sencillamente dejaron solos a los candidatos.
La dirigencia nacional y estatal están por decirlo de alguna manera enfrentadas con los lideres locales y el jefe político nacional está enredado en sus propios problemas que nunca volteó a Tamaulipas para apuntalar a los candidatos que su partido postuló.
Es decir, no se ve por donde MORENA y los suyos puedan movilizar a sus simpatizantes el día de la elección.
La apuesta simple y llana de los morenistas cuerudos es ceñirse a la marca del partido, al arrastre que tuvo AMLO en el 2018 y esperar que la inercia que pudo haber quedado los lleve al triunfo.
El panorama está así, PRI y MORENA mancos por decir lo menos, sin capacidad de maniobra, sin recursos, sin operadores, ante un PAN que llega a la elección por primera vez en muchas contiendas sin enfrentamientos internos y apuntalado por una gestión estatal que de acuerdo a las encuestas está bien calificada.
Ahora que esa fortaleza del PAN también puede ser una debilidad, porque un resultado abrumador ante candidatos de MORENA y PRI flojísimos, algunos desconocidos y solos, obligadamente levantará suspicacias y la inminente judicialización del proceso, porque los de la izquierda querrán ganar en los tribunales lo que no consigan en las urnas, apostando a que a nivel federal tendrían influencia sobre los órganos electorales jurisdiccionales.
Falta muy poco, insisto, ya seguro que en los partidos que si tienen lana deben estar diseñando el menú del domingo 2 de junio, veremos por qué se deciden para ese día.
El cantante expulsado…
Anoche fue expulsado de La Voz México el candidato del Movimiento Ciudadano por el Distrito 22 Martín Pantoja. Ya no la hizo y ahora tendrá que hacer campaña de verdad para intentar siquiera sacar unos cuantos votos y no quedarle mal a los que lo convencieron de cantar al mismo tiempo que hacer proselitismo.
Le apostaban a que el programa, por cierto bien chafa, lo veían como 2 millones de personas y que así Pantoja podría dar la sorpresa en el sur de Tamaulipas, la realidad es que en las encuestas nunca pintó, ayer lo echaron de la Voz, el domingo 2 de la política sería. Comentarios: meliton-garcia@hotmail.com Twitter: @melitong