Ayer tuve oportunidad de ver de cerca y escuchar directamente a grandes líderes a nivel mundial, que se han desarrollado en diferentes disciplinas, todos hablaron de su experiencia de vida, cómo iniciaron y cómo es que llegaron a posicionarse, coinciden en que fue a base de sacrificios, constancia y mucha preparación.
El evento México Siglo XXI es organizado por la Fundación Telmex-Telcel y esta fue su edición 17, es realizado para sus becarios de licenciatura y posgrado, en 2019 bajo el lema “El México que inspira al mundo. Siempre posible, nunca imposible”, y tiene por objetivo compartir experiencias de forma directa, como parte de una formación integral de los jóvenes mexicanos.
Después de escuchar qué mueve a una “estrella de rock” como Bono, de la banda irlandesa U2, para crear dos fundaciones, una que ayuda a las personas para mejorar su calidad de vida y otra que financia programas para tratar VIH y sida; o cómo una mujer británica, que se fue de pequeña a Australia y es nacida en una familia pobre, ha vencido a todo el sistema político controlado por hombres, un logro que la llevó a ser la primera mujer en ostentar el cargo de Primer Ministro de Australia.
Para mi sorpresa tienen más en común de lo que pensé ellos con Simón Borrero, un hombre colombiano que tuvo la visión, y terquedad, necesaria para convertir una idea en una empresa tecnológica valuada en más de mil millones de dólares llamada Rappi, o con Usain Bolt, un velocista nueve veces medallista olímpico.
Pero de qué sirve conocer historias de éxito de hombres y mujeres que ni siquiera entienden nuestro idioma o que tampoco tienen un perfil, ni personal ni profesional, similar al nuestro, pues es fácil, buscan inspirar, mostrar que a pesar de no nacer en una familia poderosa, que a pesar de no tener dinero o de que nadie confía en ti, debes tener el valor y coraje necesarios para creer en uno mismo.
La intensión de uno de los hombres más ricos del mundo en invertir en la educación de miles de jóvenes y de invertir en acercarles las experiencias de líderes mundiales, para que los inspiren, no se puede medir con valores monetarios, pues en una época en la que la inmediatez ha generado en la mayoría de los jóvenes millennial, y otro tanto de los centennial, un sentimiento de aspirar a conseguir todo rápido y fácil, y al no poder ser así, les genera un gran sentimiento de frustración.
Es una realidad que México tuvo un cambio de rumbo político drástico gracias a un creciente sentimiento de frustración de la población.
Hoy fue un día para reflexionar sobre las coincidencias que tenemos cualquiera en el mundo, que aunque los contextos son muy diferentes, todos tenemos necesidades básicas y aspiraciones similares que nos llevan a trabajar por un mejor futuro y por hacer realidad los sueños.
Pero no se trata sólo de querer, es una realidad que se necesitan cualidades especiales pero sobretodo poder desarrollarlas y aprender a utilizarlas, se pueden tener todas las aptitudes físicas y todo el conocimiento, pero no saber aplicarlo y seguir siendo “ordinario”, lo cual tampoco está mal, al final cada quien vive la vida que desea.
Hoy miles de jóvenes no están esperando vidas “normales” y están empujando cambios sociales, ayer vi a muchos de ellos y lo mejor es qué hay personas que además de todo lo que han logrado, sumaron a su lista de cualidades la humildad, clave para disponer de un día para compartir su experiencia de vida y tips que los han ayudado a lograr el éxito, sea lo que sea que les represente éxito para ellos.
Una de mis conclusiones al final del evento es la necesidad de generar oportunidades para los jóvenes que se están preparando y buscan con todas sus ganas, conocimiento y aptitudes, cumplir sus sueños, a veces solo les hace falta alguien que además de si mismos, crea en ellos o les alcance la forma de dar el brinco, esta experiencia fue una plataforma, eso seguro.
Sin duda fue también un aprendizaje para mi, algo que me satisfizo en demasía, porque segur aprendiendo en una de las cosas que más necesito, me confieso ignorante, así que lo necesito.
QUE CURIOSO
Carlos Slim Helú fue el participante más atento en el ciclo de conferencias de México Siglo XXI, lección de que aún siendo uno de los hombres más ricos y poderosos del mundo, no se debe perder la humildad para aprender de los demás.
Nota mental: dejar de darle importancia a los soberbios sabelotodo con quienes te tropiezas en la vida, hay que aprender a detectarlos, y evitarlos.