MÉXICO.- Ricardo Peláez llegó al Deportivo Guadalajara con una misión específica: reacomodar a la institución y posicionarla en los primeros planos del futbol mexicano nuevamente. Y vaya que lo está haciendo.
El directivo comenzó a trabajar de manera fuerte desde que asumió y ya abrochó refuerzos de todos los gustos. La jerarquía y calidad de los jugadores es innegable y valen cada billete que Chivas está invirtiendo.
Con el correr de los días y una vez eliminado del torneo Apertura 2019, comenzaron a llegar las incorporaciones. Uriel Antuna y José Madueña fueron los primeros en caer y comenzaron a ilusionar a los Chivahermanos.
Luego, se confirmaron las llegadas de Cristian Calderón, Alexis Peña, Jesús Angulo, Víctor Guzmán y la vuelta de José Juan Macías junto al ‘Gallito’ Vázquez. Además, Erick Aguirre está muy cerca de vestir la playera del Rebaño Sagrado.
De esta manera, Luis Fernando Tena podría armar un equipo que verdaderamente genera miedo. El Deportivo Guadalajara dará que hablar en el torneo Clausura 2020.
La estructura que va tomando el nuevo equipo tapatío, hace recordar al conjunto conformado hace 26 años por Salvador Martínez Garza , quien llegó con la cartera abierta para armar a las Súper Chivas.
Con la llegada de Alberto Coyote, José Manuel de la Torre, Alberto “Guamerú” García, Carlos Turrubiates, Eduardo Fernández, Missael Espinoza y Luis Flores, en la temporada 1993-1994, el Guadalajara conformaba un plantel que prometía dejar atrás años de mediocridad.