“La compra de la nave, es símbolo de irracionalidad de grupos políticos divorciados de la realidad, pero que las circunstancias les prodigaron poder con enorme daño y perjuicio para la población”
La venta, rifa o alquiler del avión presidencial ha sido tema en estos días. A su alrededor se tejen opiniones de todo tipo, destacando chistes muy propios de la psicología pueblerina.
El asunto como que se no se toma en serio por un sector de la población de fácil manipulación por medios de comunicación, interesados en desviar la atención primordial.
Y es que la adquisición de la nave significa el concepto aberrante de gobernar por parte de la derecha conservadora y el priismo irresponsable de los sexenios anteriores. (Nota: estuve tentado a escribir “concepto estúpido” en lugar de aberrante, pero creo que los amables lectores no tienen por qué cargar con la indignación del columnista).
También quise escribir “encabronamiento” y no indignación, pero me abstengo porque cuando se elaboró esta columneja fue domingo y como sabéis, es día de guardar y hasta de asistir a misa, por la necesidad de poner en ceros el velocímetro de la conciencia.
Lo cierto es que los mexicas tenemos ahora enfrente un problema más, como si no fueran suficientes los resultantes de la corrupción e inmoralidad política que ahogó a la república los últimos 36 años.
Hay que recuperar lo más que se pueda del gasto por el tristemente célebre avión, porque es dinero público y hay que aplicarlo en obras de beneficio colectivo y no en frivolidades no correspondientes al estado de marginación que guardan alrededor de 70 millones de nacionales.
La compra de la nave, es símbolo de irracionalidad de grupos políticos divorciados de la realidad, pero que las circunstancias les prodigaron poder con enorme daño y perjuicio para la población.
¿A quién se le ocurre?…solo a un presidente egresado del PAN (Felipe Calderón), que pretendió halagar a su sucesor en busca de impunidad, que finalmente logró, toda vez que a Peña Nieto tocó las fibras más sensibles de su pedantería y egocentrismo.
El hecho forma parte de la larga cadena de tonterías producto de mentes distorsionadas, sea muy cercanas a la locura, incapaces de medir el impacto en una pobre economía como la mexica.
Que lo paguen los marginados, en tanto los políticos disfrutan de placentera vida producto de la corrupción.
¡Jijos de la malagueña!.
La comicidad desatada en torno del tema, no es gratuita ni coincidente, sino alentada por la derecha antinacionalista y el neoliberalismo pendenciero, que en los medios de comunicación y “analistas” aliados encuentran eco multiplicador.
Usted dirá que también hay cabida para la sabiduría popular que da rienda suelta a su creatividad y tiene razón, pero es diferente lo que se aprovecha como diversión simple y la perversidad utilizada por los grupos rapaces, condenados por su complicidad en el pasado reciente.
Los miles de millones de pesos para la compra de conciencias y grandes negocios al margen de la ley, dejaron de fluir. Es el motivo principal de la rabia empresarial y los vividores del presupuesto..
Es un pleito por dinero y nada más.
Si en verdad les importara el país, ¿Por qué aceptar y aplaudir la compra de una aeronave que no la tienen ni los gobiernos más poderosos del mundo?.
El asunto También tiene fondo político desde luego. Y es que esta multiplicación mediática observa el objetivo de desviar la atención y aun desvirtuar, la guerra contra la corrupción implementada por el supremo gobierno.
Ridiculizar a AMLO ha sido la pretensión conservadora, tratando de restar seriedad al régimen morenista, solo que ha resultado al revés cuando parte de lo más distinguido de la derecha, es exhibida por su relación con la ilegalidad.
El grueso expediente contra Genaro García Luna o las evidencias aportadas por priistas en desgracia o bajo proceso, son las mejores pruebas del profundo daño causado por el neoliberalismo a la población.
Y ni modo que sea invento.
LA VISITA PRESIDENCIAL
Este fin de semana el presidente de México visitará Tamaulipas. Estará en la capital del estado y no en la frontera, como lo dijo el confundido delegado José Ramón Gómez Leal, de quien por cierto, se rumora de su inminente “retiro” como tal, (cese pues), tras tantísimos problemas y limitaciones personales para cumplir con su tarea.
El asunto es que AMLO viajará a estos andurriales, cuando su partido MORENA no supera la penosa situación que le atormenta desde siempre.
Ya sabéis que en dicha organización no existe liderazgo que valga, ni siquiera para contener la división interna que llevó a la toma de sus instalaciones por uno de los grupos en pugna, durante varios meses.
Llega AMLO cuando algunos de sus colaboradores “andan desbocaos”, moviéndose por todo el estado en búsqueda de candidaturas a cargos de elección, entre ellas la de gobernador.
Los más insistentes: “El guasón”, Héctor Martín Garza González y el propio Gómez Leal y el más obsesivo, es decir, a Rodolfo González Valderrama.
Y en el escenario legislativo, Américo Villarreal Anaya, quien espera y desea que AMLO aplique otra dosis de la nostalgia que motivó a convertirlo en senador, ante la incredulidad de la paisanada.
Recordéis que Américo padre, como funcionario de Recursos Hidráulicos, apoyó e hizo amistad con AMLO cuando el ahora Presidente abría brecha por los pueblos indígenas y campesinos de Tabasco.
Y AMLO lo agradeció regalándole una senaduría a su hijo…los tamaulipecos esperamos que el gesto no se repita con la candidatura a gobernador, comprobada que es, la mediocridad de Américo Villarreal Anaya.
¿Sabrá AMLO que este junior priista recientemente se pronunció contra la creación del Instituto para la Salud y el Bienestar?. Que alguien se lo diga.
De manera que el Presidente viene cuando las tres cuartas partes de la diputación local morenista, pasaron a engrosar las filas de sus adversarios, sin el menor rubor o conciencia que lo reclame, sease con singular alegría.
Y por otra parte, cuando funcionarios del IMSS e ISSSTE, están bajo sospecha de traicionar el objetivo fundamental de la 4T, es decir, acabar con la corrupción.
Con todo esto y algo más, el futuro de MORENA se observa más obscuro que el color que lo distingue, lo cual no puede ni debe ser ignorado por el presidente.
SUCEDE QUE
Falleció Vito Alessio Álvarez Rodríguez, tal vez el último miembro de la vieja guardia magisterial del estado a la que supo hacer honor, durante sus largos años dedicado a su vocación de enseñar.
Vito Alessio, en su tiempo, fue “el cachorro” de aquella histórica generación de maestros que tuviera su mayor esplendor en los años sesentas, bajo el liderazgo de Raúl García García, Rigoberto Castillo Mireles, Guadalupe Longoria, Blas Uvalle González, José María Sánchez y algunos más.
Generación lastimosamente confrontada por asuntos políticos, durante la transición sexenal de Praxedis Balboa a Manuel Ravizé, que a pesar de ello, dejara profunda huella en la formación de incontables generaciones de profesionistas.
Nuestro más sincero pésame a la familia del maestro Vito Alessio, en la seguridad de que sus alumnos conservarán por siempre, su recuerdo y admiración.
Descanse en paz.
Y hasta la próxima.
