CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- La violencia que en los últimos 14 años ha dejado en Tamaulipas más de 8 mil 752 víctimas de homicidio doloso, dejó a cientos de menores en la orfandad y con un futuro incierto por la pérdida de alguno de sus padres o ambos.
En los últimos años, ya son 2 mil 638 niños, niñas y adolescentes que fueron acogidos por el programa “Nuestros niños, nuestro futuro”, donde se les otorgan becas educativas, útiles escolares y uniformes, ayuda psicológica, acompañamiento jurídico y asesorías.
De acuerdo con la Directora del DIF Tamaulipas, Omeheira López Reyna, aún hay muchos niños que se encuentran en esa condición de orfandad, por lo que han trazado como meta, lograr incorporar mil menores y adolescentes cada año y concluir el sexenio con al menos 6 mil menores a quienes se pueda ayudar a través de este programa.
Por municipio, es Victoria donde se tiene un mayor registro de niños, niñas y adolescentes que han perdido a uno o dos de sus padres por situaciones relacionadas con la violencia.
Explicó que todos los menores que incluyen en el programa, tienen una familia extendida, es decir, vive con alguno de sus padres, pero cuando los han perdido a los dos, son acogidos por abuelos, tíos, algún hermano mayor e inclusiva por algunos amigos muy cercanos de la familia.
Aclaró que en las casas hogares que maneja el Sistema Integral para la Familia (DIF) de Tamaulipas, no se encuentra ningún menor que haya sufrido la pérdida de sus padres a causa de una situación violenta.
Así en Victoria se han registrado a 925 menores en orfandad por este motivo, seguido del municipio de Reynosa donde se sumaron a 311 niños; ambas ciudades con altos índices de violencia.
En San Fernando, a la fecha se atienden a 217 niños con este programa; el municipio fue golpeado fuertemente por la violencia, especialmente entre el 2010 y 2011, cuando se descubrieron las fosas clandestinas, donde los delincuentes dejaban a cientos de sus víctimas.
En el municipio de Soto La Marina, se han registrado a 121 niños, otros 105 en El Mante, 78 en Padilla; en Hidalgo se tiene un registro de 77 menores que reciben el apoyo a través de este programa y 74 más en Tampico.
En Nuevo Laredo, ciudad donde la violencia es constante, hay 72 menores que viven con una familia extendida y por tanto requieren un apoyo por parte del Sistema DIF, oros 67 en Jiménez y 63 más en el municipio de Mier.
También en Valle Hermoso se han registrado a 55 menores, en tanto que el municipio fronterizo de Matamoros, se han sumado 52 menores en condición de orfandad por situaciones violentas.
En Güémez y Aldama se han registrado a 50 menores y adolescentes en cada municipio, otros 44 en Abasolo y 43 más en Llera de Canales y la misma cantidad en Miguel Alemán.
En el sur del estado, en el municipio de Ciudad Madero, se tiene un registro de 30 menores en situación de orfandad, 24 en Altamira, 18 en el municipio de González, 15 en Jaumave, 13 en Tula y la misma cantidad en Villagrán.
En San Carlos, hay 11 niños, en Río Bravo se han inscrito a nueve menores, ocho en Méndez, seis en Gustavo Díaz Ordaz, cinco en Bustamante, cuatro en Burgos, dos en San Nicolás, y un menor inscrito en cada uno de los municipios de Nuevo Morelos, Cruillas y Gómez Farías.
La autoridad, sabe que no son todos los menores que han quedado huérfanos por la pérdida de uno o ambos padres, por lo que esperan aumentar el padrón hasta al menos 6 mil beneficiados.
De acuerdo con la Directora del DIF Tamaulipas, Omeheira López Reyna, a través del programa “Nuestros niños, nuestro futuro”, se entrega un apoyo de mil 500 pesos trimestrales, como parte de la beca de manutención a que tienen derecho los niños incluidos en el programa.
Además, se entrega por familia, cada tres meses, una dotación de productos alimentarios de la canasta básica, como un apoyo alimentario, que les permita complementar su desarrollo.
Existen otros dos apoyos que se otorgan de manera anual a cada uno de los menores y adolescentes que se encuentran en situación de orfandad como resultado de la violencia.
Se trata, explicó la funcionaria, de un apoyo anual de 600 pesos, que también puede entregarse en especie, según lo determine el DIF, para la adquisición de útiles escolares.
También de manera anual, se otorgan mil pesos, que también pueden ser en especie, para la compra de uniformes escolares que les servirán durante todo el ciclo escolar que estén cursando.
“A raíz de la creación de dicho programa el Sistema DIF Estatal ha implementado la Escuela de Reconciliación y Paz, un espacio que otorga ayuda holística, psicológica, emocional y espiritual a quienes han sido víctimas colaterales de delitos de alto impacto”.
En estos lugares, los menores y sus tutores, participan en sesiones de meditación en las que reciben enseñanzas que ayudan a liberar sus emociones para evitar que con ánimos de venganza caigan en las manos de los que tanto dolor les han causado.
“Se busca, sanar internamente su sufrimiento, reconciliarse con la vida y como resultado perdonar, transformarse y vivir en paz; a través de módulos y sesiones de meditación y actividades en grupo el alumno accede a diversas herramientas del manejo de emociones para el perdón”.
Basada en enseñanzas provenientes de la India, hay escuelas de reconciliación y paz en San Fernando, Reynosa, Tampico, y Nuevo Laredo, donde se busca que los niños y sus tutores liberen su sufrimiento, sanen internamente y perdonen para poder vivir en paz.
“La transformación del ser humano da como resultado una mejor persona, buenas relaciones familiares, relaciones laborales, una buena sociedad y, en última instancia, unidad en la humanidad y paz”.
Sobre los trámites más solicitados al área jurídica son la jurisdicción voluntaria de declaración de ausencia y presunción de muerte (en caso de desaparición o secuestro).
Información testimonial para acreditar en concubinato, cuando muere uno de los cónyuges, testimonial para acreditar la dependencia económica, investigación de filiación.
Así como la jurisdicción voluntaria para nombramiento de tutor de menores e incapaces (en caso de tener la guardia y custodia de un menor), juicio sucesorio testamentario e intestamentario.
Procedimiento especial sobre perdida de patria potestad, juicio de guardia y custodia de menor, rectificación de actas y el juicio de reconocimiento de paternidad o maternidad.