TAMPICO ALTO.- La situación para residentes de 24 comunidades que integran la costa de Cabo Rojo, se complica de forma preocupante, debido a que en los últimos años la pesca se está terminando y genera que gran cantidad de jóvenes abandonen sus poblados.
Las comunidades prácticamente se están quedando con población integrada solo por menores de edad, mujeres y adultos mayores, ya que las oportunidades de trabajo y de una vida mejor para los jóvenes es nula y se ven obligados a emigrar.
Don Eloy Delgado Sosa, pescador de la comunidad, manifestó que por razones que desconocen, el nivel de salinidad de la laguna de Tamiahua se redujo y con ello prácticamente se terminó la producción de ostión que era una importante fuente de ingresos.
Por otra parte, las especies de escama se han reducido y la pesca ha caído de forma grave, al grado que algunas especies casi han desaparecido complicando aún más la situación.
Manifestó que la producción agrícola esta marginada, debido a la falta de vías de comunicación para sacar sus cosechas, las cuales movilizan vía lancha, las encarecen y los gastos de gasolina los hunden.
Por ello la urgencia de darles forma al proyecto de caminos rurales y el chalán, para pasar sus cosechas y ganado, además de detonar proyectos turísticos que darían lugar a otros proyectos económicos.
En tanto esto no suceda, los jóvenes de esta zona, seguirán partiendo, separándose de sus familias para buscar un futuro y trabajo en otras ciudades o estados, cuando podrían forjarse una vida digna en sus comunidades.