TEXAS.- El gobernador Greg Abbott dijo el lunes que la orden de quedarse en casa “ha hecho su trabajo” y que dejará que la restricción expire cuando corresponde, este 30 de abril.
“La apertura de Texas debe ocurrir en fases”, dijo en una conferencia de prensa en el Capitolio.
La “Fase Uno” del plan, propuesta por el gobernador, comenzará el viernes 1ro de mayo y permitirá que todas las tiendas, restaurantes, cines y centros comerciales abran con una capacidad limitada de no más de un 25%. Los museos y bibliotecas también pueden reabrir con el mismo número de ocupación.
“Esta orden permite que todos estos negocios reabran”, dijo. “No requiere que lo hagan”.
En la primera fase de su plan, las “poblaciones vulnerables” como los ancianos deben permanecer en casa tanto como sea posible, dijo.
El plan también permite a todos los profesionales de la salud con licencia reabrir, pero los hospitales con licencia deben reservar el 15% de la capacidad para los pacientes de COVID-19.
Los condados con cinco o menos casos pueden reabrir al 50% de su capacidad el viernes, dijo Abbott.
El estado pasaría a la segunda fase del plan de Abbott a partir del 18 de mayo si no hay un “brote” secundario de casos de COVID-19, dijo Abbott.
Abbott también dijo que a partir de ahora las peluquerías, barberías, bares y gimnasios no deben abrir, ya que los médicos recomendaron que permanecieran cerrados.
Añadió que hasta el momento, el estado ha registrado 1.6 millones de reclamos de desempleo y se han pagado más de 2 billones de dólares en beneficios de este particular a los texanos.
Pese a la apertura de negocios, el Gobernador, no ofreció ninguna actualización durante la conferencia de prensa sobre si las escuelas podrán reabrir para el verano, por lo que hasta el momento, se mantiene el cierre por todo el año escolar.
Las iglesias y los lugares de culto permanecerán abiertos. Se permitirá reanudar los deportes al aire libre siempre y cuando no haya más de cuatro participantes jugando juntos a la vez.
CON INFORMACIÓN DE NOTICIAS YA