TAMPICO, TAMAULIPAS.-Una adecuada alimentación a pacientes con COVID-19 es fundamental para reducir la posibilidad de presentar un cuadro grave de la enfermedad, lograr una pronta recuperación y disminuir el riesgo de desnutrición señaló el Instituto Mexicano del Seguro Social.
La coordinadora de Nutrición y Dietética del IMSS en Tamaulipas Erika de la Garza González refirió que una alimentación balanceada en conjunto con el tratamiento médico y farmacológico que se ofrece a pacientes sospechosos y confirmados de COVID-19 en los hospitales generales del Seguro Social, es de suma importancia durante el proceso de atención integral del enfermo.
De la Garza González informó que los pacientes hospitalizados en el IMSS, reciben una alimentación completa con un plan individualizado, siempre ajustado a los requerimientos del mismo, “y para ello se realiza una evaluación de su estado nutricional en las primeras 24 horas de su ingreso”.
Detalló que a los pacientes estables se les da una alimentación completa día a día, dividida en tres tiempos de comida, para otorgar cinco raciones de verduras y frutas, seis de cereales y tres de proteína de alto valor biológico.
“Para un paciente promedio, la recomendación de consumo de energía es de 20 a 30 calorías por kilogramo de peso, lo que equivale de entre 1800 a 2000 calorías, además de mantener una buena hidratación”, apuntó la nutrióloga.
Para reconocer a los responsables de establecer la dieta de los derechohabientes, tanto en lo preventivo como durante un padecimiento, el IMSS celebra el Día del Personal Nutricionista cada 16 de junio.